- El año pasado se abrieron 172 carpetas de investigación por este delito y sólo en 23 de los casos se emitió sentencia.
En 2021, el Poder Judicial del Estado de México emitió 23 sentencias condenatorias por el delito de trata de personas, un avance 155% mayor con respecto a las dictadas en 2020, las cuales fueron 9; sin embargo, el desafío que impone un flagelo de esa naturaleza es significativo, pues nuestra entidad se encuentra en primer lugar en la incidencia de este ilícito y la mayoría no se denuncia.
En los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el ámbito nacional, durante el periodo de enero a noviembre de 2021, se abrieron 588 carpetas de investigación del fuero común por el delito de trata de personas, de las cuales 30% se iniciaron en la entidad mexiquense.
En su estadística, el Estado de México fue la entidad con la mayor incidencia de este delito, al acumular en ese periodo 172 casos; le sigue la Ciudad de México, con 70. En tanto, las entidades federativas que registraron el menor número de indagatorias y que durante 2021 se mantuvieron en cero fueron Colima y Durango.
De acuerdo a la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y para la Protección y Asistencia de las Víctimas de estos Delitos, en su artículo 10, se define a la trata de personas como: “Toda acción u omisión dolosa de una o varias personas para captar, enganchar, transportar, transferir, retener, entregar, recibir o alojar a una o varias personas con fines de explotación”.
La pobreza, el hambre y la enfermedad son factores que les permiten atrapar a sus víctimas por medio de diversos métodos como el enamoramiento, ofrecimiento de empleo, engaño y abuso de poder.
No obstante, para el titular de la Cátedra Extraordinaria Trata de Personas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Mario Luis Fuentes Alcalá, la trata de personas “es uno de los crímenes más violentos, clandestinos y difíciles de identificar, en particular por la falta de denuncias por parte de las víctimas, en su mayoría mujeres, niñas y personas de la diversidad sexual”.
En la difusión que la UNAM realiza de la quinta edición del diplomado en Línea sobre Trata de Personas, el investigador alertó que una parte importante de la población por su condición de pobreza, desigualdad, discriminación y falta de garantías de sus derechos más elementales, son vulnerables y sujetos a ser explotados por los tratantes de personas.
Asimismo, sostiene que la pobreza, el hambre y la enfermedad son factores que les permiten atrapar a sus víctimas por medio de diversos métodos como el enamoramiento u ofrecimiento de empleo, engaño y abuso de poder. Por tanto, aunque se cuenta con la ley general sobre el tema, así como instituciones públicas encargadas de hacer justicia en esa materia, éstas se encuentran rebasadas.
