Durante 2019 se hicieron 593 donaciones y el año pasado sólo hubo 150
Guadalupe Rosas Suárez
Se reactiva la donación de órganos y tejidos en el Centro Estatal de Trasplantes del Estado de México (Cetraem). En este año, ya se consiguieron 34 donaciones y se espera recuperar la dinámica con apoyo de los mexiquenses; pues de 593 donaciones en 2019, sólo se consiguieron 150 en 2020 por el impacto de la pandemia.
Dalia Velázquez Sánchez, supervisora Médica del Área de Normatividad de la Subdirección de Normatividad, Regulación e Igualdad de Género del Cetraem, explicó que a raíz de que se declaró la pandemia, hubo un momento en que se detuvo toda la actividad porque todas las instalaciones se convirtieron en hospitales Covid y estaban al tope. “Fueron dos meses que paramos porque no se sabía nada sobre el virus y no había posibilidades de tener un área libre de Covid”.
Actualmente, en la lista de espera del Estado de México hay 150 personas que necesitan un trasplante de riñón; seguido por 80 pacientes que requieren córneas.
Por fortuna, el programa de donación ya está en marcha con todas las medidas correspondientes, toda vez que se endurecieron los protocolos y lo primero que se descarta es que el donador no tenga infección por Covid, pues hay pacientes que son positivos, pero asintomáticos. Por ello, se agregó la prueba PCR y se cuida que el área esté debidamente sanitizada, al igual que los quirófanos y personal involucrado.
“Tenemos bien establecidos nuestros procesos y eso ha permitido que el programa se reactive y la gente que desee donar puede hacerlo con confianza”, detalló la especialista, quien recordó que también se puede donar en vida un riñón o un lóbulo del hígado. En estos casos, es por consanguinidad, ya que se trata de hermanos, padres o tíos que apoyan a un familiar y si resultan compatibles se procede.
De una persona fallecida, se pueden procurar órganos y tejidos. Se manejan dos vertientes, si muere por paro cardiorespiratorio se obtienen córneas, piel, huesos y tendones. Si la muerte es encefálica, porque su sistema nervioso ya no tiene aporte sanguíneo, al paciente se le mantiene con oxígeno y es cuando se trasplantan órganos y tejidos como riñones, corazón, hígado, pulmón, aparte de piel, tendones, huesos, etc.
La doctora Dalia subrayó que hemos avanzado en la cultura de donación, pero aún falta mucho por conseguir, pues tiene que ver con una decisión personal de querer ayudar al prójimo a través de la donación y una vez que la persona fallece sus órganos pueden ser canalizados.
En cada nosocomio, hay un coordinador hospitalario de donación al cual se pueden acercar los familiares y se lleva a cabo el proceso que conlleva realizar el trasplante, pero lo importante es que la familia esté enterada para que no impida que se lleve a cabo la donación.
En la lista de espera del Estado de México hay 150 personas que necesitan un trasplante de riñón; seguido por 80 pacientes que requieren córneas.