IMPULSO/ Miguel A. García
Toluca
La violencia física al interior de los hogares es el principal problema que aqueja a familias de escasos recursos asentadas en comunidades y barrios de alta marginalidad de las ciudades, destacando que los más vulnerables son los niños, niñas, mujeres y personas de la tercera edad.
De acuerdo a Rosa Martha Loria San Martín, directora de la organización social lucro. “Corresponsabilidad Social Mexicana, A.C.”, es necesario que el próximo Gobierno estatal desarrolle una estrategia para paliar esta tendencia desde acciones colectivas a favor de la formación humana, la cohesión social y el desarrollo comunitario.
Expresó que, lamentablemente, este tipo de violencia sigue creciendo en el Estado de México, empujado también por su situación geográfica, pues se tienen municipios en la zona metropolitana con barrios enfrentando alta criminalidad, así como demarcaciones en el sur y norte experimentando alta marginación.
Señala la necesidad de ofrecer alternativas para el cierre de brechas de desigualdad e inequidad en el acceso de oportunidades, dignificación humana y empoderamiento motivando el sentido de corresponsabilidad y pertenencia de los individuos a favor de la prevención y mitigación de problemas sociales de México.