IMPULSO/ Gabriela Landetta
Toluca
El proyecto del Tren Interurbano Toluca-México fue considerado desde un primer momento como un negocio, “porque realmente no hicieron ningún estudio y violaron la normatividad del desarrollo urbano de la capital mexiquense”, manifestó la décimo cuarta regidora de este municipio, Paulina Martina Monroy Córdova, quien señaló que autoridades de los tres niveles de gobierno incurrieron en esa situación.
“¿Qué va a pasar cuando esté en funciones el tren?, ¿Cómo va a ser la movilidad en las estaciones si ya en Pino Suárez es un caos?”, cuestionó al señalar que se prevén graves problemas de movilidad debido a la gran cantidad de gente que se estará trasladando de la Ciudad de México a Toluca y viceversa, aspecto en el que no se pensó desde el principio.
La regidora del Partido del Trabajo e integrante de la Comisión de Movilidad y Transporte informó que en su momento esta regiduría organizó diversos foros sobre el tema, y en ellos, especialistas universitarios también se refirieron a esos problemas y a que Toluca no está preparada para recibir al tren interurbano, con toda la problemática que implica.
Al respecto, expresó que tanto peatones como automovilistas se verán afectados, por lo que sugirió que se realice un estudio de movilidad y, con base en sus resultados, pudieran construirse pasos a desnivel que ayuden a desahogar el aforo vehicular que podría concentrarse en las zonas donde se ubicarán las estaciones del tren, así como apoyar a que los peatones puedan cruza, sin problemas la avenida Las Torres en cualquiera de sus tramos.
