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Ciudad de México
Eduardo Serio, director de la fundación Black Jaguar – White Tiger, confirmó que la muerte del gorila Bantú en el zoológico de Chapultepec fue responsabilidad de los veterinarios quienes le aplicaron una sobredosis de anestesia, pues pretendían enviarlo al zoológico de Guadalajara para que se apareara con alguna de las dos gorilas que hay allá.
El director de fundación Eduardo serio dijo que se encontraba muy triste por la noticia y ante la pregunta de ¿de quién fue la responsabilidad? contestó: “La responsabilidad es de los veterinarios que se pasaron de la anestesia, en cualquier especie ya sea humana o animal, (la anestesia) siempre representa un peligro”.
Bantú sería enviado para aparearse con las gorilas de Guadalajara, pues lo intentó con la gorila que hay en el Estado de México, pero al estar demasiado vieja, no se logró el apareamiento.
El gorila Bantú, nació en el zoológico de Chapultepec e iba a cumplir 25 años en septiembre. (López Dóriga)
