Marco A. Rodríguez Blasquez.
Concluyeron los festejos navideños de fin de año y con ello las reuniones y encuentros sociales con amigos y familiares, algunas virtuales y otras presenciales, anunciándose simultáneamente lo que estamos esperando desde hace diez meses, la aparición y aplicación paulatina de la vacuna, y sin embargo en estos últimos días, estas reuniones, eventos masivos, la pandemia ha alcanzado el mayor número de contagios, lo que ha obligado a distintos países a decretar un nuevo confinamiento hasta finales de febrero o marzo. En México el nivel de hospitalización es el más alto desde el inicio del Covid-19, se estima que cada día fallecen mil personas.
Nos enfrentamos a un futuro incierto, en donde la población experimentará cambios sustanciales que estarán determinados por los avances tecnológicos, que darán paso en este mundo globalizado, a nuevos sistemas económicos, políticos y financieros que serán determinantes en los cambios culturales y de valores que experimentará la sociedad.
Científicos, médicos, educadores, investigadores, empresarios, economistas entre otros, se han dado a la tarea de repensar el mañana, buscando nuevas formas de como arribar al nuevo orden social. Espero que este cambio generado por la pandemia, se traduzca en reinventar un nuevo orden geopolítico más humano, más justo y equitativo.
Considero oportuno mostrar en las siguientes líneas, los distintos escenarios dados a conocer por pensadores que han marcado una tendencia en el mundo, y cuyas tesis en anteriores ocasiones se han abordado en esta columna.
Francis Fukuyama, politólogo estadounidense, experto en analizar puntos de inflexión en la historia, aporta su punto de vista sobre el impacto de la pandemia en el orden político internacional; sostiene que las respuestas exitosas a la pandemia han sido la capacidad del Estado, la confianza social y el liderazgo. Los países que han contado con estos tres ejes: un aparato estatal competente, un gobierno en el que los ciudadanos confían y escuchan, así como líderes efectivos, los resultados han sido impresionantes para bien de la ciudadanía.
A los países con Estados disfuncionales, polarizados y liderazgos deficientes, les ha ido mal, dejando a sus ciudadanos y economías expuestos y vulnerables. Menciona como ejemplo de este modelo a E.U. y Brasil, países que están gobernados por Presidentes que se han mostrado incompetentes ante la crisis sanitaria.
Noam Chomsky. Filósofo y politólogo estadounidense, se refiere a lo complejo del Covid-19, cuyo impacto demoledor pone en riesgo la viabilidad humana. El plantea para el futuro mediato dos escenarios: El primero donde los gobiernos autoritarios se imponen sobre el bienestar económico, poniendo en riesgo la vida de la población que disminuye su calidad de vida y el segundo escenario, en donde aquellos gobiernos que priorizan las necesidades de los seres humanos y no permiten responder a la pandemia con toda la fuerza del Estado.
Henry Kissinger, contempla que la pandemia, evidenciará a las instituciones de distintos países que han fallado. La realidad es que el mundo nunca será el mismo después del coronavirus. Este pensador impulsor de la globalización, refiere que ningún país, ni siquiera E.U., podrá en un esfuerzo puramente nacional superar al virus. Abordar las necesidades del momento, debe ser en última instancia con una visión de futuro y programas de colaboración global.
Discutir ahora sobre el pasado será infructuoso y desgastante, más bien hay que pensar lo que se tiene que hacer y esforzarse a sanar las heridas de la economía mundial. Finalmente expresa que el desafío para los líderes, es manejar la crisis mientras se construye el futuro. El fracaso podría incendiar al mundo.
Yuval Noah Harari, historiador y escritor israelí, menciona que se esperan cosas muchísimo peores si no tratamos el problema medioambiental. Durante el Covid-19, estamos viendo en las instituciones de muchos países que la confianza se debilita hasta alcanzar niveles alarmantes. Estas han sido las estrategias adoptadas años atrás por aquellos políticos que han buscado deliberadamente minar la confianza en los medios de comunicación, en las instituciones académicas y en las autoridades.
Ahora nos damos cuenta de lo peligroso que es, ya que la confianza es el motor del sistema. Nuestro mundo se basa en la confianza depositada en desconocidos.
La tesis que con anterioridad ha planteado, refiere que hace cincuenta mil años el hombre era cazador y recolector y vivía en grupos muy pequeños, por lo que conocían a quienes los rodeaban y llegaban a confiar unos de otros, ahora en el mundo moderno, depositamos nuestra confianza en instituciones impersonales y colaboramos con miles de millones de desconocidos, de modo que si esa confianza desaparece el mundo entero se desploma y toda nuestra civilización se vendrá abajo.
Concluye que la tormenta pasará, pero las decisiones que tomemos ahora podrán cambiar nuestra vidas en los próximos años, debiendo actuar con rapidez.
Hasta aquí algunas de las teorías que exponen filósofos, historiadores y politólogos, sobre el futuro incierto de la humanidad.
Aprovecho este espacio, para enviar mis mejores deseos por un 2021 a mis familiares y amigos con los que ahora, la forma de comunicarnos es a través de chats, lo que ha permitido hacer más llevadero este momento de crisis, en donde tenemos la gran oportunidad de mantenernos comunicados, actualizados, compartiendo información importante, datos culturales, música, conferencias, libros y en ocasiones nos permite reírnos con los memes, chistes y ocurrencias, y en otras entrarle al debate en temas de la vida nacional. Esto ha sido de gran ayuda para todos y nos ha servido para sentir un poco más cerca a nuestros familiares y amigos.
Director de BGC Consultoría Estratégica.
