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Ciudad de México
La UEFA no se ha quedado inmóvil ante los desorbitados desembolsos realizados por el París Saint Germain (PSG) en los fichajes de Neymar (222 millones de euros) y de Kylian Mbappé (180) y ha anunciado que iniciará una investigación para analizar si el club francés ha vulnerado las normas del Fair Play financiero.
Es la primera vez que la UEFA, alarmada y preocupada por esos movimientos multimillonarios, actúa con tanta celeridad, apenas 24 horas después de que concluyese el mercado veraniego en Francia.
Una vez que se cerraron las operaciones en la Liga gala, el organismo que rige el fútbol europeo ya dispone de datos para poder empezar a determinar si el PSG disponía de margen económico para realizar esas fuertes inversiones teniendo en cuenta sus ingresos —no solo por venta de jugadores— y las amortizaciones de los salarios de su plantel, entre otros parámetros.
El Fair Play financiero impide que un club arroje pérdidas por más de 30 millones de euros. La UEFA investiga ya si con los gastos realizados por el PSG este límite —“el requisito del punto muerto”, según la normativa— ha podido ser sobrepasado.
También está puesta bajo sospecha la operación de Mbappé, disfrazada bajo una cesión el primer año y una posterior compra definitiva al Mónaco, su club de procedencia. El PSG se expone a una expulsión de las competiciones europeas que se haría efectiva en la temporada 2018-19 si la investigación concluye que las operaciones por ambos jugadores vulneran las leyes.
Los análisis de UEFA también se centrarán en si el modo de financiación del PSG se ajusta a la normativa establecida. En este último apartado, el club presidido por el catarí Nasser Al-Khelaifi ya fue sancionado en mayo 2014 al considerar que los ingresos por patrocinio procedentes de Qatar Turismo estaban inflados.
Los analistas económicos de UEFA determinaron por entonces que las cantidades declaradas por el PSG por este concepto estaban fuera de mercado al ser tasado dicho patrocinio muy por encima de su valor real.
Por esta infracción la entidad francesa firmó un pacto con la UEFA en el que se comprometía a: no presentar un déficit en sus cuentas superior a 30 millones de euros, no elevar los sueldos de sus jugadores durante dos temporadas, no inscribir más de 21 jugadores del primer plantel en las competiciones europeas durante el ejercicio 14-15 y a aceptar un tope de gasto en los fichajes.
Además, se le retuvieron 60 millones de euros de sus ingresos por participar en competiciones europeas, de los cuales se le devolverían 40, como así fue, si cumplía con el pacto que expiraba en 2017. En las mismas fechas de mayo de 2014, el Manchester City recibió una sanción muy similar a la del PSG por el patrocinio de Etihad.
El inicio formal de la investigación fue anunciado ayer por la UEFA en un comunicado. “En los próximos meses, la Cámara de Investigación del Comité de Control Financiero de Clubes de la UEFA se reunirá periódicamente para evaluar cuidadosamente toda la documentación relativa a este caso”.
La UEFA considera que el juego limpio financiero es un mecanismo crucial de gobernanza que tiene por objeto garantizar la sostenibilidad financiera del Fútbol Europeo de Clubes”, reza el comunicado.
En los primeros pasos de la investigación, la UEFA solicitará al club parisino todo lo relativo a su estado contable y podrá ampliar la solicitud de documentación a medida que transcurra el proceso. (Periódico AM)
