IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
El jefe de Gobierno, José Ramón Amieva, anunció que el mando de la seguridad al interior de la Central de Abasto (CEDA), dejará de estar a cargo del Fideicomiso que encabeza Sergio Palacios y lo asumirá la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Tras la muerte de la oficial Margarita Rivera, quien falleció al interior de la central, por dos balazos en la cabeza que le propinó un delincuente, autoridades del Gobierno de la Ciudad de México acordaron reforzar las medidas de seguridad en el sitio.
Amieva Gálvez explicó que la CEDA sólo era vigilada por elementos auxiliares, por lo que ahora se sumarán policías preventivos quienes instalarán filtros de revisión en los accesos, para evitar el ingreso de objetos “ilícitos”, tampoco se permitirá el consumo de alcohol en áreas comunes.
“Lo que acordamos es generar un mando coordinado, va a existir un mando policial que va a supervisar el interior y el exterior, la coordinación entre el sistema de cámaras y monitoreo que tiene este C2 de la Central de Abasto, la coordinación de los elementos de policía auxiliar con los elementos de policía preventiva”, indicó.
El mandatario enfatizó que no se permitirá “que delante de las cámaras alguien pase con gorra o que pasen con la capucha de la sudadera”, además se iniciará un programa de registro de los 12 mil carretilleros que laboran en la Central.
“Se va a generar un programa para que cada carretillero cuente con un gafete con un código QR y la policía pueda estar identificando. Aquel que no trae su gafete con el código, pues habrá que preguntarle qué hace ahí”, agregó.