Guadalupe Rosas Suárez/Toluca
Pese a la pandemia se niega a morir la festividad de la Virgen del Carmen, la más antigua en Toluca, rica en folclor, colorido y religiosidad popular. Entre los fieles católicos goza de gran arraigo esta devoción y para los danzantes no puede faltar el mural azteca que manifiesta no sólo el sincretismo cultural, sino la fe de un pueblo y su concepción del ser supremo.
Como parte de la evangelización que trajeron los españoles, el Templo del Carmen fue construido a principios del Siglo XVII y puesto en servicio en 1711, incluso antes que la parroquia de San José El Sagrario, que es considerada la iglesia más antigua, que perteneció a la Tercera Orden Franciscana y fue bendecida el 8 de noviembre de 1727.
Por ser parte del Monasterio Carmelita, la iglesia del Carmen cuenta con gran riqueza cultural por el arte barroco, las pinturas al oleo y el arte sacro. Muestra de ello, es la capilla en honor de Santa Teresa en cuyos muros secontemplan valiosos óleos que en 1722 firmó el pintor Francisco Martínez en los cuales se pueden observar dos pasajes: “La Cena de la Virgen” y “LaGlorificación”.
Además, tieneobrasdel pintor Juan Rodríguez, por lo quelas imágenes de losSantos y Santas de la Orden son muy valiosas artísticamente.
Sin embargo, en lo que respecta al valor religioso, este templo tiene una de las advocaciones marianas más queridas en Toluca: la Virgen del Carmen, para muchos milagrosa y que durante siglos con la devoción al escapulario ha bendecido a miles de católicos de la zona conurbada. Por ello, los sacerdotes carmelitas programan muchas celebraciones durante el día, casi cada hora.
Por otra parte, el Grupo de Danza Azteca región Toluca, que se vinculan con la etnia Matlatzinca, mantiene firme su compromiso de no dejar morir la tradición de acudir a venerar a la “Carmelita”, pues, aunque no es la patrona de Toluca, para los oriundos es y seguirá siendo la fiesta más representativa de la ciudad, por eso no dejan de implorarle y danzar en su honor.
El Templo del Carmen fue construido a principios del Siglo XVII y puesto en servicio en 1711.
El Grupo de Danza Azteca región Toluca, que se vinculan con la etnia Matlatzinca, mantiene firme su compromiso de no dejar morir la tradición de acudir a venerar a la “Carmelita”