Acción Ciudadana Frente a la Pobreza señal, además, que existen tres millones 653 mil personas excluidas, desempleadas o que no pueden acceder al trabajo remunerado.
Guadalupe Rosas Suárez/Toluca
En el Estado de México hay más de cinco millones de personas con trabajo precario, no les alcanza para dos canastas básicas y no tienen seguridad social; pero lo más alarmante es que existen tres millones 653 mil personas excluidas, desempleadas o que no pueden acceder al trabajo remunerado, informó Rogelio Gómez Hermosillo, coordinador de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
Tras dar a conocer el Semáforo de Trabajo Digno región Valle de México, resaltó que en la entidad se cuenta con 10 millones 164 mil mexiquenses que se encuentran en edad o condición para trabajar, de las cuales solamente 670 mil tienen un empleo formal, con ingreso suficiente para la canasta básica familiar y seguridad social, lo cual les permite estar fuera del círculo de pobreza.
Esta información forma parte de un ciclo de conferencias que se presentaron como resultado de un análisis del mercado laboral, elaborado a partir de datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo que levanta el INEGI.
Con base en esos datos, detalló que casi la mitad de la población productiva potencial del Estado de México tiene trabajo precario, aunque existan seis millones 511 mil personas ocupadas, más de cinco millones tienen pocas posibilidades de subir su nivel económico y mejorar la calidad de vida.
Subrayó que las personas excluidas representan la tercera parte de la población productiva potencial, es decir, el 36%, con lo cual la entidad mexiquense se encuentra en la quinta peor del país.
“El Estado de México está peor que la Ciudad de México”, expresó Rogelio Gómez tras insistir que a pesar de tener la misma geografía por el alto índice población ha pegado más la pandemia en el desempleo y trabajo precario, lo cual se traduce en pobreza.
Por cada 10 personas que tienen un trabajo estable, con las condiciones mínimas deseables, hay 75 que no lo tienen y las personas con trabajo formal son menos de 7%, lo cual insistió es una situación insostenible que nos indica que el semáforo laboral está en rojo. “Somos la zona más poblada, estamos en el centro del país, pero la situación del trabajo es grave y se agudizó con la pandemia.
Gómez Hermosillo comentó que aunque la Ciudad de México tiene indicadores de desempleo más altos que el Estado de México, la realidad es que en la entidad mexiquense la gente trabaja en condiciones más precarias, tiene menos posibilidades de acceder a un trabajo digno, porque el salario se ha deteriorado y las prestaciones sociales se han reducido o eliminado.
Por cada 10 personas que tienen un trabajo estable, con las condiciones mínimas deseables, hay 75 que no lo tienen y las personas con trabajo formal son menos de 7%,
Las personas excluidas representan la tercera parte de la población productiva potencial (36%), con lo cual la entidad mexiquense se encuentra en la quinta peor del país.
