IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad de México
Por la mañana, Antonio Mohamed estaba haciendo sus maletas para viajar a la Ciudad de México.
La charla con Ricardo Peláez, del martes por la noche, había sido reconfortante, abierta y con vistas a futuro. Sería el nuevo director técnico del Cruz Azul. Las fricciones con el directivo, nacidas en el América, quedaban de lado, enterradas. Sólo hacía falta que lo llamara, para quedar de acuerdo en la cuestión de los dineros…
Ese mismo martes, en el hotel Royal, al sur de la Ciudad de México, el cuartel general de la directiva del Cruz Azul, se había visto a Robert Dante Siboldi.
Y se le vio muy a gusto.
No era para menos. Al final, ganó la carrera para ser el nuevo director técnico de La Máquina. Será presentado este viernes, aunque será con calidad de interino, porque la idea es que esté a prueba y su continuidad se evalúe.
El gran objetivo celeste es Matías Almeyda, quien tiene contrato con el San José Earthquakes de la Major League Soccer (MLS) y ha pedido -por lo menos- terminar la actual temporada. Pese a esto, se deberían pagar tres millones de dólares al club californiano por concepto de rescisión.
Pero esto será un efecto dominó. “El Turco” era el principal candidato de Peláez, quien está molesto por la decisión tomada y la noche de este jueves dimitió -como director deportivo- en la cadena ESPN.
Además de esta situación, no le ha gustado el regreso de Alfredo Álvarez y Víctor Garcés a la directiva de La Máquina.
