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Estados Unidos
• Según un estudio publicado por la firma Counterpoint Technology Market Research en The Wall Street Journal, el gigante surcoreano facturará 110 dólares por cada celular vendido.
Esto se debe a que parte de los componentes del smartphone son proporcionados por Samsung. Por ejemplo, son proveedores de las pantallas OLED y las memorias flash NAND, entre otras cosas.
La relación comercial entre Apple y Samsung se explica en la necesidad: la surcoreana es una de las pocas empresas que puede cubrir la demanda de pantallas y chips de fabricantes como Apple.
De cumplirse las estimaciones de ventas del nuevo iPhone en los 20 meses siguientes a su lanzamiento, las ganancias que obtendrá Samsung por su acuerdo pueden llegar a superar las logradas por el propio Galaxy S8 en ese mismo periodo. Nada mal, ¿no?
La nueva “joya” de Apple saldrá a la venta el 3 de noviembre, en dos versiones (64 y 256 GB de almacenamiento) y su precio comenzará en USD $999.