IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad De México
El ciberataque, cuyo costo se calcula en 300 millones de pesos y afectó a cinco instituciones financieras, no se hizo con el fin de vulnerar al Banco de México (Banxico) para desestabilizar al país en pleno proceso electoral, afirmó el gobernador del instituto central, Alejandro Díaz de León.
“Estos ataques tienen, en la inmensa mayoría de los casos, un objetivo pecuniario, es decir, extraer recursos y tener beneficio económico”, dijo en conferencia para actualizar datos sobre la crisis del sistema de pagos que inició el pasado 27 de abril.
Descartó que los cibercriminales hayan dirigido su operación para aprovecharse de una institución que goza de credibilidad por ser una autónoma y de prestigio, para causar perturbaciones en las elecciones.
Señaló que esto ilustra que la sofisticación, frecuencia y complejidad de estos ataques han sido crecientes, pues conforme la potencia de cómputo avanza, lo hacen los riesgos.
Explicó que a finales de octubre se firmó un elemento para fortalecer la ciberseguridad y la estabilidad del sistema financiero, pero esta situación crítica apunta a que “debemos redoblar el paso” en esta materia.
“Lo estamos haciendo tanto para mitigar los incidentes que hemos estado detectando en las últimas semanas, tanto con una mejora en el tema de continuidad operativa, planes de redundancia y elementos que contribuyan a mejorar el nivel de ciberseguridad del sistema”, manifestó.
Detalló que el ataque fue contra tres bancos, una casa de bolsa y una caja de ahorro popular. Señaló que, debido a que las denuncias que hicieron algunos de los afectados no son públicas, no cuentan con los detalles.
Reconoció que hay múltiples ataques de este tipo; sin embargo, poco sofisticados que no llegan a rendir frutos y otros, como el reciente, que son más complejos y que involucra a más personas y elementos.
Lo primero, consideró es identificar sus características para aplicar medidas que no afecten las operaciones.
Por eso se tomaron tiempo para dar información de este caso, justificó.
Cantidades ridículas. El vicepresidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Robles Miaja, dijo que las cantidades que se lograron robar de los bancos con el ciberataque contra la conexión al SPEI rebasan apenas los 100 millones de pesos.
“Algunos bancos sí tuvieron pequeños montos que los criminales lograron sacar, pero son cantidades ridículas. Son cifras menores, sí estamos hablando de millones pero muy por debajo de lo que se ha manejado. La cifra exacta no la tengo en la cabeza pero debe estar en ciento y pico de millones”, dijo el directivo.
Robles Miaja, quien también es presidente del consejo de administración de BBVA Bancomer, resaltó que no se afectó el patrimonio de los clientes.
Sobre el comentario del banquero, Alejandro Díaz de León dijo que “con independencia del monto, yo no [lo] calificaría. Es completamente fuera de lugar porque los que nos ocupa es un tema que vulnera al funcionamiento, porque a la gente la deja preocupada, se les retrasan pagos”, dijo.
Líneas de investigación. La Procuraduría General de la República señaló que la Unidad de Investigaciones Cibernéticas y Operaciones Tecnológicas de la Agencia de Investigación Criminal tiene varias líneas de indagación para dar con los responsables del ciberataque, el cual afectó a cinco instituciones, entre ellas Banorte, Banjército, Citibanamex e Inbursa.