IMPULSO/ Miguel A. García
Toluca
- Alfredo Barrera llamó a los universitarios de Atizapán de Zaragoza al diálogo y a la unidad.
Aclaro que no hay imposición del nuevo director del plantel, sin embargo, la postura de la UAEM ante la manifestación es de respeto.
Alfredo Barrera Baca, rector de la Universidad Autónoma del Estado de México, llamó al diálogo y unidad con relación al conflicto del Centro Universitario de Atizapán de Zaragoza, esto luego de que alumnos del plantel acusaron la imposición de un nuevo director, lo que generó la toma y suspensión de clases este jueves.
El Rector estableció la necesidad diferenciar la democracia universitaria de la “democracia partidista”, toda vez que en la casa de estudios se privilegia la unidad entre los universitarios, por lo que la postura de la UAEM frente a las manifestaciones será de respeto.
Asimismo, llamó a conocer al detalle cuál es la normatividad dentro de la representación institucional de la UAEM, en la que sí pueden participar alumnos, profesores, investigadores y trabajadores desde sus distintos sectores, normatividad que, afirmó, se está cumpliendo en este caso.
“El proceso de elección se realizó con base en la normatividad y en los tiempos que establece, no hay motivo para ampliar los tiempos, a menos de que se haya incurrido en alguna falta en la normativa para revertir el proceso; me parece que el proceso se ha llevado plenamente en apego a la normatividad, se inscribieron las personas que querían hacerlo”, argumentó.
Aseguró que la convocatoria se hizo pública en su momento para quedar abierta a todos los interesados, desde los académicos e investigadores que cumplieran con el perfil establecido.
“Todo aquel que cumple con los requisitos puede registrarse, yo creo que es necesario que todos vayamos conociendo el contexto de lo que es la universidad, tenemos que ser ejemplo de esa normatividad y procesos”, finalizó el funcionario estatal.
Reconoció la expresión de los estudiantes, sin embargo, acotó, es menor por tratarse sólo de un grupo inconforme, por lo que los conminó a privilegiar la unidad universitaria y no la violencia, sentenciando que el proceso “deberá continuar”.
