IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
Esta mañana la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) abrió a la circulación vehicular, incluyendo camiones pesados, dos carriles de sur a norte en el kilómetro 93+800 del Paso Exprés, donde surgió un socavón el 12 de julio pasado que cobró la vida de dos personas. Sin embargo, las tareas de reparación, que consisten en la edificación de un viaducto, continúan.
Esos carriles conocidos como el cuerpo B de la autopista, tardaron tres meses y 10 días en ser parcialmente reparados, porque de acuerdo con Héctor Castañeda Molina, director del centro SCT Morelos, todavía falta excavar para retirar el relleno y el derrumbe del muro de contención.
Castañeda Molina señaló que ahora los trabajos de piloteo, colocación de cabezales y trabes se concentrará en el cuerpo A, carriles de norte a sur, los cuales prevén terminar en la primera semana de diciembre de este año.
“Los pilotes soportan la carga de la superficie de rodamiento. Sobre los pilotes se coloca un cabezal y sobre este las trabes y luego la loza”, explicó.
Un par de días después de que se abrió la oquedad, la SCT informó que un viaducto sería la solución definitiva. Esa obra, detalló, contará con 48 metros de longitud, una sección transversal de 36 metros, tres claros, uno central de 24 metros y dos laterales de 12 metros, una losa de 20 cm de espesor, soportada sobre pilas de un 1.5 metros de diámetro y una altura aproximada de 25 metros.
Según Castañeda Molina toda la construcción probablemente esté concluida a finales de diciembre o principios de enero de 2018.
Aunque las diligencias son realizadas por la constructora Freyssinet, en cuya página web se ostentan como especialistas en la elaboración de puentes, Héctor Castañeda sostuvo que la reparación y costos de la misma aún está a cargo de la empresa Aldesa; “eso ya es una cuestión interna de la empresa”, subrayó Molina.
El viaducto, según dijo la semana pasada el subsecretario de Infraestructura de la SCT, Óscar Raúl Callejo Silva, costará cerca de 70 millones de pesos.
–El origen del problema
La oquedad, de acuerdo con el Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Morelos (CICEM), se originó a causa de que la tubería que atraviesa el Paso Exprés la barranca Santo Cristo colapsó por el peso de la construcción de la autopista y la colocación de dos muros de contención. Lo cual creó una obstrucción en la cañería por la que atraviesa la barranca Santo Cristo.
Además, los paredones de concreto se encontraban cimentados sobre un terreno de relleno, no sobre una base firme que le diera soporte y cuando se dañaron, la solución de la SCT fue inyectar cemento, el cual se filtró y ocasionó un taponamiento más grande. Por lo que cuando llovió el agua encontró el tapón y se infiltró por las fracturas de tubo, lo cual socavó la base de la base de la carretera y creó un hoyo, en el cual cayeron dos hombres que perdieron la vida.