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Turquía
El presidente turco Recep Tayyip Erdogan prometió hoy erradicar a los rebeldes kurdos, tras confirmar la muerte de 30 presuntos miembros del proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK) en un operativo en el norte de Irak.
“Hemos tenido operaciones transfronterizas durante la noche y más de 30 militantes del PKK han sido asesinados”, afirmó el mandatario turco en una reunión con alcaldes de todo el país en el Palacio Presidencial, según un reporte de la edición electrónica del diario Today Zaman.
Erdogan destacó que las fuerzas de seguridad turcas continúan con sus operaciones contra el proscrito PKK dentro y fuera del país con el objetivo de acabar con los rebeldes, que desde hace más de un mes efectúan casi a diario ataques mortales contra soldados y policías turcos.
“No nos detendremos aquí, no habrá descanso; continuaremos, hasta el final”, afirmó el presidente en su discurso ante alcaldes y autoridades municipales.
El mandatario no precisó dónde fueron abatidos los 30 rebeldes kurdos, aunque el diario recordó que el Ejército ha estado bombardeando posiciones del PKK en las montañas del norte de Irak, así como el sureste de Turquía, tras la ruptura de un alto el fuego.
A mediados de julio pasado, el gobierno turco bombardeo posiciones del PKK y dio por terminada la tregua de dos años y medio, días después de un atentado en la localidad Suruc, cerca de la frontera siria, atribuido a los rebeldes kurdos y en el que 32 personas murieron.
El ejército informó, por su parte, que seis miembros del PKK fueron muertos en operaciones llevadas a cabo en la provincia de Hakkari durante la noche y 19 más el viernes en ataques aéreos en el norte de Irak, aunque no está claro si Erdogan se refirió a estas operaciones.
En una declaración, el Ejército destacó que los bombardeos en Hakkari se registraron luego de que dos policías murieron en un ataque por presuntos miembros del PKK la tarde del lunes en la provincia Sur de Adana, que tiene una importante población kurda.
El gobierno del presidente Erdogan había iniciado en 2012 conversaciones de paz con el encarcelado jefe del PKK , Abdulá Ocalan, para tratar de poner fin a una insurgencia, que ha dejado 40 mil muertos desde su inicio en 1984, sin embargo las conversaciones fracasaron.
El gobierno acusa al PKK de usar la tregua para acopiar armas, aunque la oposición asegura que el proceso de paz terminó después de que un partido pro kurdo arrebató la mayoría absoluta al gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) en las elecciones de junio pasado.(Noticias MVS)
