IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad De México
Tal como lo esperaba el consenso del mercado, la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió por unanimidad mantener el objetivo para la tasa de interés interbancaria a un día en 7.50%.
Tras dos alzas consecutivas de 25 puntos base cada una, es la primera vez en el año que el banco central no hace cambios en la tasa de referencia. Analistas consideraron que el próximo movimiento estará subordinado al tipo de cambio.
Mencionaron que el tono del comunicado de política monetaria mejoró al confirmarse el proceso de desinflación previsto en las metas trimestrales que introdujo por primera vez Banxico como parte de un esfuerzo por una mayor comunicación y transparencia.
Para no mover la tasa, el cuerpo colegiado del banco central consideró la evolución reciente de la inflación general, la cual se redujo de 5.55% en enero a 5.04% en marzo.
Observó que como resultado de las acciones de política monetaria y del desvanecimiento de los choques que la afectaron, la inflación subyacente pasó de 4.56% a 4.02% en el periodo referido.
También tomó en cuenta el hecho de que la evolución y perspectivas de sus principales determinantes y los pronósticos de la misma no presentan cambios significativos respecto de la trayectoria prevista.
Además de que las expectativas de inflación general para el cierre de este año se mantuvieron casi sin cambios, y las de mediano y largo plazos permanecieron en 3.5%.
La postura de política monetaria actual es congruente con el anclaje de las expectativas de inflación, así como con una tendencia descendente de la inflación general anual hacia su meta de 3%, afirmó.
Resumió que el balance para la inflación mantiene un sesgo al alza asociado a riesgos, en un entorno con alto grado de incertidumbre.
Los riesgos. Este escenario está sujeto a riesgos como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), aumentos en precios agropecuarios y el proceso electoral.
Hizo ver que si bien la probabilidad de una evolución desfavorable en la negociación del TLCAN se ha reducido, puede haber condiciones más restrictivas en los mercados internacionales por las acciones de política monetaria en EU y la volatilidad asociada a las elecciones.
Advirtió que la economía mexicana enfrenta factores de riesgo considerables, por lo que el crecimiento continúa sesgado a la baja.
Economía. Se prevé que la economía seguirá enfrentando un panorama complejo, lo que hace relevante que, además de seguir una política monetaria prudente y firme, se impulse la adopción de medidas que propicien una mayor productividad, y que las autoridades consoliden las finanzas públicas.
En el comunicado de política monetaria se ponderó que la información disponible sugiere que en los primeros meses de 2018 la actividad económica en México continuó incrementándose, impulsada por el sector de servicios y cierta recuperación de la actividad industrial.
