IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad De México
El robo del producto que transportaron 14 pipas o autotanques de Petróleos Mexicanos le significó pérdidas por 5.8 millones de pesos en 2018.
De acuerdo con la Dirección Jurídica de la petrolera, este delito se incrementa y existe la posibilidad de que sea aún mayor en los próximos años, porque van a entrar en circulación 500 pipas más que compró Pemex para cubrir el abasto.
Las cifras reportadas por la petrolera se refieren al parque vehicular propio, estimado en mil 485 unidades, y no se contabilizan los autotanques que la iniciativa privada le renta a la empresa y que son susceptibles al delito por parte de huachicoleros.
En este caso están 141 empresas que le prestan el servicio de transporte terrestre de productos derivados del petróleo y gases a granel por autotanque y que operan 3 mil 10 unidades, de acuerdo con el Sistema Integral de Información Comercial de Pemex.
Sólo en los primeros cinco días de enero de este año, cuando arrancó el plan emergente para aumentar el número de pipas para el suministro de gasolinas en el centro del país, la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) reportó que a sus asociados les robaron seis autotanques.
El problema no es menor por lo que representa para Pemex, en términos de costos operativos, los traspasos por autotanque, una cantidad de 8 mil 861.9 millones de pesos anuales.
Hasta ahora, por cada pipa o autotanque que le roben a Petróleos Mexicanos, con capacidad de entre 20 mil y 30 mil litros, los huachicoleros obtienen en promedio ingresos ilegales por 418 mil 285.7 pesos.
El año pasado le robaron 14 pipas, usadas para distribuir combustibles a las estaciones de servicio en Chiapas, Puebla, Michoacán y Guanajuato.
En todos los casos, los autotanques fueron recuperados, pero los huachicoleros dejaron vacías las unidades que salieron con producto de las Terminales de Almacenamiento y Reparto en estas entidades.
Según las estimaciones de la petrolera, en estas 14 pipas se transportaba un volumen de 320 mil litros de gasolinas y diesel, que al precio promedio del año estimado en 18.30 pesos por litro —únicamente gasolinas—, representó una pérdida para la empresa de 5.8 millones de pesos.
De ese volumen, 270 mil litros corresponden a gasolina Magna y Premium y 50 mil litros más a diesel, lo que refleja que el interés de los delincuentes está en las gasolinas.
EL UNIVERSAL publicó el pasado 5 de noviembre de 2018, que en los primeros ocho meses de ese año Pemex reportó ante las autoridades el robo de nueve autotanques, cifra que se elevó a 14 al cierre del año.
En el reporte de la Dirección Jurídica de Pemex se aprecia que la mayor actividad de los huachicoleros dedicados al robo de estas unidades, se presentó en octubre y diciembre del año pasado, con tres pipas por mes.
En octubre, los huachicoleros despojaron a Pemex de una pipa en Puebla, otra en Chiapas y otra en Guanajuato, que transportaban en conjunto 70 mil litros de gasolinas Magna.
En diciembre fueron tres en Puebla con el mismo volumen, pero con gasolina Magna y diesel.
La tendencia que sigue este delito muestra que el robo de autotanques de Pemex, excluyendo el robo a transportistas privados, utilizados para el movimiento de gasolinas y diesel a estaciones de servicio, se está convirtiendo en un problema serio para la empresa petrolera y se suma a la larga lista de bienes que el crimen organizado le sustrae todos los días.
Los datos proporcionados por Pemex Logística revelan que en tres años el despojo de las pipas de Pemex aumentó 180%.
En 2016, el número de unidades que le robaron a Petróleos Mexicanos fue seis y para el cierre del año pasado la cifra llegó a 14.