IMPULSO/ Adrián Mendoza
Toluca
Existirían 500 mil pobres más en México si la canasta básica subiera por lo menos uno por ciento, pero la PROFECO no ha reparado en proteger los bolsillos del consumidor al mantener los precios en equilibrio para bienestar de las familias mexicanas, señaló Ernesto Nemer Álvarez, titular de la institución.
El Procurador federal resaltó que, en su nueva etapa, la PROFECO no es una inquisidora de castigo al proveedor, es una institución que busca la conciliación equitativa entre consumidores y proveedores para no lastimar los egresos del consumidor ni los ingresos de los empresarios, pues, a final de cuentas, son ellos los que mueven la economía del país.
“Todos, absolutamente todos, somos consumidores, incluso los empresarios que acuden a la obtención de materia prima son consumidores, le compran al productor sus mercancías o materias y las transforman en productos refinados o procesan las bondades de cada material, es por ello que la PROFECO asume la calidad de institución conciliadora y con carácter social para velar por el beneficio de ambos sectores”, subrayó Nemer Álvarez.
El funcionario ratificó su plan, que consta de cuatro vertientes centrales o primordiales, la primera refiere a la efectividad en el cumplimiento de la ley, con ello, asegura, los consumidores no deben preocuparse de su poder adquisitivo; la segunda tiene que ver con la equidad para proteger al consumidor; la tercera hace referencia al no divorcio entre proveedor y consumidor; por último, la cuarta contempla que es indispensable el uso de la tecnología para mejorar los procesos de la PROFECO.
