Impulso/Toluca
La riqueza cultural de los pueblos originarios del Estado de México queda plasmada por los artesanos en sus diversas creaciones, en las que se reflejan sus tradiciones y costumbres, ya sea en artículos utilitarios o en aquellos de uso decorativo.
Aunque el delcron ha sustituido como relleno a la lana, con cuerpo de manta, rostro bordado y cabello de estambre, las coloridas muñecas mazahuas que realiza Amalia Martínez han trascendido hasta nuestros días y poco a poco se consolidan como uno de los juguetes artesanales más buscados por las personas que desean realizar un obsequio original, en esta temporada decembrina.
Doña Amalia recuerda que la cercanía que de niña tuvo con sus abuelas y tías fue el detonante para aprender la técnica de bordado, el tejido en telar de cintura y el proceso de teñido a base de tintes naturales y posteriormente para salir de su natal Villa de Allende a ofrecer sus creaciones, en diversos puntos de México y ciudades como San Diego, Los Ángeles, Chicago y Milwaukee en Estados Unidos.
Con varias décadas de experiencia y dedicación, actualmente la artesana mexiquense produce un centenar de muñecas por mes, actividad a la que se han sumado su esposo e hijas, siendo estas últimas la cuarta generación de artesanas que mantienen vivo el legado de las muñecas artesanales mazahuas.
Las muñecas plasman una parte de la creadora, ya que menciona que a veces el estado de ánimo se refleja en las facciones del rostro de las muñecas o en la combinación de los colores de la vestimenta, haciendo única cada pieza.
Las creaciones de doña Amalia pueden adquirirse en recintos oficiales como la tienda del Centro Cultural Isidro Fabela “Casa del Risco” y en el Museo de Arte Popular, ambos en la Cuidad de México, y en territorio mexiquense en las Tiendas Casart y las tiendas de artesanías del municipio de Toluca.
Asimismo, si el público desea ver el proceso de creación y armado de las muñecas, las diversas ferias y exposiciones artesanales que realizan diferentes dependencias mexiquenses, son una oportunidad para ver en acción a Doña Amalia, ya que es una de las frecuentes participantes.