IMPULSO/Agencia SUN
Nuevo León
En un sábado lleno de dramatismo, el norte no podía quedarse atrás.
Los Rayados de Monterrey se saboreaban la victoria frente a Morelia, triunfo que los ponía cerca de la punta del torneo, pero…
En el futbol mexicano nadie puede darse por vencido, ni tampoco como vencedor.
Gol cerca del final de los Monarcas, del Morelia, empate a dos en donde prevalece la justicia.
Juego donde la prioridad fue atacar, donde los porteros fueron factor, para bien y para mal.
Primero falló Sosa. A los siete minutos vino un tiro libre a favor de los regios, tiro potente que le rebota de las manos al portero de Morelia, el balón queda suelto para que el colombiano Stefan Medina lo mande al fondo.
Monterrey fue por más. el joven Luis Madrigal se levanta sobre todos, nadie le gana y anota el segundo de los locales a los 28’.
Todos daban por ganado el juego para el Monterrey, pero los morelianos tenían otra opinión.
Y del error nace el gol.
Los Rayados se equivocan en la salida, le dejan la pelota a Rodrigo Millar quien después de una gran maniobra vence con tremendo disparo a Barovero.
Morelia fue por todo, sin nada que perder, y cerca del final, a los 86’, Ferreira le gana por lo alto a Basanta, Barovero rechaza pero el balón le queda libre y el paraguayo iguala para que la justicia prevalezca.
