IMPULSO/Agencia SUN
Colombia
Este martes, México dejará atrás el pronóstico de 104 medallas de oro que las autoridades deportivas hicieron antes de iniciar los Juegos Centroamericanos y del Caribe y prácticamente asegurarán el primer lugar en el medallero, por primera vez en 54 años, con Cuba participando.
La delegación mexicana vuelve a ser la potencia deportiva del área y resarce la actuación de hace cuatro años, cuando albergó la justa regional en Veracruz, y cumple con la meta establecida por el director de la Conade, Alfredo Castillo.
Con Cuba compitiendo, México no había sido capaz de terminar en el primer lugar del medallero (San Salvador 2002 y Mayagüez 2010, los caribeños no asistieron) desde San Juan 1966, donde los atletas tricolores triunfaron con 38 preseas doradas de las 138 disponibles.
A tres días del final de Barranquilla 2018, la ventaja de México sobre Colombia (55) y Cuba (54) parece inalcanzable, a pesar de que estas dos naciones cosecharán una gran cantidad de preseas doradas en atletismo, boxeo, lucha y judo.
En Veracruz 2014, México ganó 115 oros de 432 que estuvieron en juego para 26%. En Barranquilla, hasta el momento, el gran culpable de la reivindicación de México en el medallero ha sido la natación; el país retomó la cima al conseguir 43 preseas, 15 de ellas de oro, que representa, 37% que entregó este deporte.
El taekwondo aportó ocho títulos de Centroamericanos, mientras los clavados se colgó seis de los ocho metales áureos disponibles. A pesar de la diferencia, los directivos mexicanos prefieren mantener la cautela, pues matemáticamente, Colombia y Cuba se mantienen en la pelea y con el atletismo y boxeo a su favor.
El calendario de los Juegos es muy parecido al que se tuvo hace cuatro años, cuando Cuba le arrebató el primer puesto a México a falta de tres días. “Si bien, tenemos un importante margen en el medallero, todavía no podemos asegurar que es suficiente para amarrar el primer lugar. Viene el cierre fuerte de los cubanos”, declaró María José Alcalá, jefa de Misión de la delegación mexicana.
La dirigencia cubana ya también presupuesta la derrota en Barranquilla, a tres días del final de la competencia, es algo que tenían en el radar. “Hicimos un trabajo desde el punto de vista psicológico, porque cinco días antes de terminar los Juegos es muy probable que Cuba quede tercero”, dijo José Miranda, director del Instituto Superior de Cultura Física.
México registró para la edición XXIII de los Juegos a 672 atletas, 128 menos que Cuba, que no estuvo en competencia en 90 de los 457 oros en disputa, debido a que hay deportes que no son parte de su programa de alto rendimiento.
Con menos cantidad de atletas y deportes en competencia, los cubanos miran el éxito o fracaso de su delegación en el porcentaje de oros que puedan tener en las finales. Hace cuatro años, Cuba conquistó en el atletismo 23 oros.
