IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
Hace una semana, la pregunta en el aire era: ¿habrá encontrado Luis Miguel a su madre en el psiquiátrico de Canarias, España?
La respuesta es no y quedó revelada en el capítulo 11 de la serie sobre el intérprete de “La incondicional”.
El episodio de este domingo titulado “Marcela” sigue la desintegración de la familia Gallegos Basteri, en parte porque para 1986, la madre de Luis Miguel se percata que Luis Rey no sólo sigue con su amante, sino que además se la lleva de gira por todo el mundo.
Cuando Marcela confronta a Luisito, este le dice que si ella se atreve a dejarlo, la mata. Ante la amenaza, Marcela decide ir a visitar a Luis Miguel durante la presentación que da en el Luna Park en Buenos Aires, lugar en el que el artista sube al escenario a su madre para cantarle el tema “Marcela”.
Tras esta emblemática velada, Luis Rey enfurece y tras decirle a sus hijos que su madre se quiere separar de ellos, pregunta a sus hijos con quién se quieren ir. Alejandro se va con Marcela y el pequeño Sergio, mientras que Luis Miguel, con lágrimas en los ojos se va con su padre, situación que deja desconsolada a la italiana.
En un salto en el tiempo, cuando Micky tiene 21 años, descubre que su madre no es la mujer que está en el psiquiátrico y decide pedirle ayuda a Miguel Alemán para buscarla, el amigo le dice que él no tiene los contactos pero que Fede de la Madrid podría ayudarle.
Micky le comenta la situación a su amiga Erika, la que a su vez no tarda en contarle a su novio Fede, quien celoso de la relación de su novia y el cantante, decide terminarla.
Luego del abrupto con su ex pareja, Fede recapacita y aunque ya no regresa con Erika, decide ayudar a Micky y le da el contacto del equipo de investigación Israelí, Mosad.
Es en esta misma etapa cuando ante la falta de prontitud de Paco Calderón para entregar las canciones para el nuevo disco del cantante, la compañía le propone hacer un disco de “grandes éxitos”, propuesta a la que se niega “El Sol”.
Tras hablar con Erika, Micky decide hacer reversiones de grandes clásicos de la música mexicana y llama a Armando Manzanero para que produzca el mencionado material.
Por su parte, en este mismo año, Luisito Rey se encuentra en crisis financiera y con un estado de salud deteriorando, por lo que decide viajar a México para pedir la ayuda de Andrés García, quien le aconseja ir a ver a Luis Miguel.
Luego de convencer a Hugo López, Luisito logra entrar al backstage de uno de sus conciertos para ver a su hijo, pero éste se muestra indiferente y lo ignora una vez que lo ve.
El episodio culmina con Luis Miguel y Erika besándose a la orilla del mar en Acapulco.