IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad de México
Pierre Albert Louis Dubois Desvignes (Dijon, Francia, 1931) fue un cura católico francés que luchó contra la dictadura militar de Augusto Pinochet durante el periodo de 1974 a 1990. En ese entonces fue golpeado, detenido y finalmente expulsado de Chile por incitar a las clases populares a defender sus derechos.
Dubois organizaba comedores comunitarios y en cuestión de educación infantil llevó a cabo una serie de talleres culturales en los barrios de la periferia de Santiago de Chile. Llegó al país en 1963 para asesorar al Movimiento Obrero Acción Católica y a la Juventud Obrera Católica en las actuales comunas de Pudahuel y Quinta Normal. También fue asignado en las parroquias de las comunidades de José María Caro y Lo Espejo.
Desde el pasado 14 de octubre, las movilizaciones en la capital y provincias de Chile estallaron debido al incremento en las tarifas del transporte público y luego las demandas se ampliaron.
En los años 80, las protestas fueron encabezadas y organizadas por Dubois y una serie de activistas religiosos, como José Aldunate, Blanca Rengifo y Mariano Puga. La caída de la Junta Militar en Argentina, tras el desastre en Las Malvinas, en 1982, era un precedente que la población chilena tuvo en cuenta, pero Pinochet se negó a dejar el poder.
La búsqueda de libertades y la organización popular hicieron que la figura de Dubois se inclinara por defender a los sectores más oprimidos. El barrio obrero de La Victoria, en Santiago de Chile, fue el sitio elegido por el párroco para trabajar con personas en riesgo de exclusión durante la época militar. Al llegar a La Victoria en 1983, se ganó el respeto y admiración de las clases obreras. A través de la palabra concientizaba a los habitantes para que defendieran sus derechos y construyeran acciones pacíficas en contra del régimen.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Bárbara Azcárraga, profesora de Historia y Ciencias Sociales por la Universidad de Valparaíso, considera que Dubois era reconocido por sus feligreses como un cura obrero, que “dejó un legado de conciencia, empatía y lucha en las calles”.
Señala que a partir de 1980 se comenzó a aplicar en las poblaciones chilenas la política de rebelión popular de masas. Recuerda que durante la década, la organización en las poblaciones de Santiago fue muy buena. De acuerdo con los especialistas, la confianza y percepción de los chilenos sobre la Iglesia católica actual bajó debido a los casos de corrupción y abuso sexual contra menores de edad.
Dubois salió de Chile en septiembre de 1986. Ya sin Pinochet en el poder, en 1990, el sacerdote regresó a Chile, pero se le prohibió vivir en La Victoria; fue trasladado al hogar de sacerdotes de la comuna de Lo Espejo. En 2001, el Senado chileno le otorgó la nacionalidad. Dubois falleció la mañana del 12 de septiembre de 2012 a los 80 años, por un paro cardiorrespiratorio.
Paulo Álvarez Bravo, historiador y geógrafo especialista en Antropología y Educación Popular por la Universidad Nacional de Quilmes, explica: “En Chile, influyó desde la década de los sesenta la Teología de la Liberación, corriente ideológica que surge en América Latina y que pone en el centro a las clases más desprotegidas, comunidades que a través de la toma de conciencia aspiran a alcanzar la liberación”.
Sobre la situación actual, la historiadora Bárbara Azcárraga señala: “Si bien los índices económicos hablaban de un país en vías de desarrollo que crecía prósperamente y que en la última década de 1990 ya había logrado ser parte del gran mercado internacional, la brecha de desigualdad social crecía de manera brutal”.
“Paralelamente la mayoría de la población comenzó a entrar en una espiral de deudas debido a que los sueldos no alcanzan para pagar la educación, la salud o el transporte. Comenzó a crecer un malestar. Se fueron acumulando reformas que sólo han mantenido el mismo sistema”, concluye Álvarez Bravo.
Bárbara Azcárraga señala que tanto hoy como en los 80, los principales sectores involucrados en la lucha son los trabajadores, estudiantes y pobladores.
Una lucha que no puede entenderse sin las bases de activismo que construyó Dubois en los barrios obreros de Chile.