IMPULSO/Agencia SUN
Colombia
Al empezar la segunda semana de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, la delegación mexicana se mantiene en el primer lugar del medallero con 190 preseas, 77 de oro, 66 platas y 47 bronces.
Con una ventaja momentánea de 36 preseas doradas sobre Colombia y 42 sobre Cuba, México necesita subir a lo más alto del podio otras 40 ocasiones (estimaciones de los directivos tricolores), para asegurar el primer puesto de la cima regional.
Los Centroamericanos de Barranquilla, hasta ahora, han contado con la mayor participación de atletas femeninas y en la delegación tricolor han sido fundamentales para el éxito conseguido a esta altura de los Juegos.
De los 190 metales, las mujeres se han colgado 95 por 81 de los hombres y 14 en mixtos. Las deportistas mexicanas ostentan 32 oros, cuatro menos que los varones.
La nadadora Liliana Ibáñez será recordada como la reina de Barranquilla al despedirse de la piscina con nueve medallas de nueve posibles. La guanajuatense se apoderó de cinco oros, una plata y tres bronces para liderar el departamento de logros individuales en la justa regional que se encuentra en su XXIII edición.
También en la natación Mónika González fue protagonista con cuatro metales dorados y uno de bronce en una disciplina en los que se batieron 43 récords para ser la de mayor calidad exhibida en la historia. México tuvo el dominio con 43 medallas.
En la alberga el seleccionado tricolor femenino consiguió 23 metales por 18 de los hombres y dos mixtos.
El jueves por la tarde, la squashista Samantha Terán se convirtió en la máxima ganadora de los Juegos Centroamericanos al sumar su décima quinta presea áurea en su carrera