IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
La Compañía Nacional de Danza presentará por primera vez “El lago de los cisnes” en el Palacio de Bellas Artes, en una versión coreográfica de Mario Galizzi sobre la original de Marius Petipa y Lev Ivanov; así como una nueva producción escenográfica y de iluminación.
A diferencia de la versión que se presentó en el Bosque de Chapultepec durante 40 años, ahora se ofrecerá un ballet completo de cuatro actos y sólo un intermedio.
“Estoy un poco asustado”, dice entre risas el director artístico de la CND, sobre esta versión que unirá el primer y segundo acto, y el tercero con el cuarto, con el fin de que solo haya un intermedio y evitar dos entreactos.
“Es una versión mía que he estudiado de los grandes maestros. Ya se hizo y lo ha bailado gente muy importante, no es una obra con la que vamos a probar, es un Lago probado y funciona como corresponde. La compañía está muy entusiasmada, hay mucho baile, los cisnes bailan no sólo harán filas, así que todos están muy entusiasmados”, añade.
Galizzi explica que la escenografía es nueva y el diseño es completo para una nueva producción de Rem Studio Mx y un nuevo diseño de iluminación a cargo de Xóchitl González. “La producción que existía estaba armada para otras dimensiones, necesitábamos escenografías que fueran fáciles de mover. Hay también ropa nueva que se hizo de otra producción y que se puede utilizar, no me gustaría que me digan que derrocho”, advierte el director artístico de la compañía.
La temporada de “El lago de los cisnes” en el Palacio de Bellas Artes, inicia el sábado 4 de marzo a las 13:00 y 19:00, domingo 5 a las 18:00, martes 7 y jueves 9 a las 20:00 y sábado 11 a las 19:00. En septiembre volverán con una segunda temporada con 8 funciones.
“En el Bosque de Chapultepec había muchas funciones, es un título con mucha demanda, pero en el Palacio no podemos tener 14 funciones seguidas por cuestiones de programación del recinto, así que tendremos dos temporadas. Tenemos repartos, gente nueva, hay mucho por bailar”, indicó.
En esta historia de amor participa la totalidad de los bailarines de la CND. En los roles principales estarán los primeros bailarines Mayuko Nihei, Blanca Ríos, Agustina Galizzi, Ana Elisa Mena, Argenis Montalvo y Erick Rodríguez. Participará además un talento nuevo de la compañía, Yoali Sousa, quien también hará a la princesa Odette, y dos nuevos solistas, Sebastián Vinet, proveniente de Chile y Gerardo Wyss, ex integrante del Teatro Colón de Buenos Aires.
“Vamos a darle oportunidad algunos bailarines en roles protagónicos. Por ejemplo, Yoali Sousa hará Odette, está en un momento en el que puede hacer muy bien el cisne blanco; Odile, el cisne negro, es mucho más complejo por cuestiones actores y emocionales”, dice.
El año pasado se cancelaron diversas funciones del Lago en el Bosque de Chapultepec, por cuestiones climáticas, que provocaron que en una de las fechas el público arrojara sillas al lago para manifestar su desacuerdo.
Mucho trabajo en la Compañía Nacional de Danza
Para el segundo semestre, la CND estrenará en México el ballet Manon de Kenneth Macmillan, y ya se encuentra en México el repositor Karl Brunet. “La compañía está trabajando muy seriamente. Sé que en Uruguay no lo han hecho, Julio Bocca tiene ganas de presentarlo pero no ha sucedido, pero sí se ha presentado en Buenos Aires y en Santiago de Chile, son las únicas compañías latinoamericanas que lo han presentado, además, por supuesto, de la Ópera de París. Es un reto porque se trata de una obra que necesita de una compañía muy interesante”, indicó.
Galizzi reconoció que este estreno implicará un gasto importante del presupuesto de la Compañía. “Hay que entender una cosa, no es que sea una obra cara, el problema ahora es la moneda. El presupuesto está de acuerdo a los precios internacionales. Tendremos seis funciones, debo saber la demanda de éxito y planear si regresa para en 2018 o la dejo descansar para 2019, porque ya está pagada por tres años y tenemos que aprovecharla”, explica.
Además, en el transcurso del año presentarán en Bellas Artes un homenaje a Petipa con terceros actos de obras como Quijote y Bayadera, y el cierre podría ser “Bella Durmiente” o “Cenicienta” en versiones completas, así como “Esquina bajan” en la UNAM. Y en 2018, dijo, “habrá más contemporáneo porque tiene que estar”.
Asimismo, Galizzi asegura que el objetivo es convertir a la CND en giras por el interior de la República. “Siempre he dicho que es una compañía nacional, tenemos que salir, pero comprendo que es fuerte salir con toda la compañía. Lo que deseo es presentar ballets completos y ya hay muchos interesados en que lo hagamos, espero que en octubre podamos hacer algo. Es una deuda que tenemos, pero siempre pensamos en lo económico”, indica.
Finalmente, sobre su estancia en la dirección artística, indica: “Uno nunca está contento, a veces te decepcionas. Lo que no quiero es quedar como un mentiroso, no quiero salir a decir que ya no puedo hacer cosas porque me recortaron el presupuesto y que luego me recuerden que yo prometí tal cosa. Si todo va bien, creo que me puedo quedar bastante, pero la cosa económica altera los nervios. Me gustaría tener maestros invitados pero implica costos, así que no estoy invitando a nadie.
El presupuesto está más chico y tengo que sacar a flote Manon. Se está cumpliendo lo que pensé que se iba a dar, vamos a ver. Por ejemplo, ya vino gente del Stuttgart y quiero que se haga una obra para la compañía, eso me parece muy importante y estoy seguro que harán una cosa muy interesante; esto sí quiero que se haga”, finalizó.
