IMPULSO/ Edición Web
Ciudad de México
La industria de lácteos se está arriesgando a la reformulación de sus productos con la idea de hacerlos más saludables. Así como Lala eliminó la hormona STBr añadida —que le inyecta a las vacas para producir más leche—, otras empresas mexicanas del sector han logrado crear y producir un sinfín de productos con características específicas o, incluso, personalizadas para el consumidor —leches sin lactosa, descremadas, light—, que ahora se orientan por una tendencia orgánica o natural.
Bove, la marca de leche orgánica de la empresa mexicana Quadritos, también dejó de utilizar hormonas sintéticas en sus productos, a pesar de que su uso les podría permitir una mayor producción.
“Es una tendencia en el mundo industrializado, creo que vale la pena aclarar que es lo mismo que los alimentos orgánicos o la comida sin sabores artificiales. Hay gente que deja las marcas para irse a alternativas más puras”, asegura René Fonseca, director general de la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (Canilec).
Esta práctica ya se ha utilizado en Estados Unidos y Australia, pero la demanda de este producto en México aún es muy baja por su alto costo, en comparación con otros, ya que en el país se venden más productos lácteos que contienen un porcentaje mínimo de leche.
Nutrileche —que tiene 20% de leche— crece a triple dígito en México, con un precio por litro de tres pesos menor al promedio de la leche entera, de acuerdo con un reporte publicado por Nielsen, compañía global dedicada a la investigación de mercados.
Sin embargo, no usar hormonas artificiales se observa como una tendencia a mediano plazo en la producción de alimentos derivados de la carne —pollo, res y cerdo— para comenzar a satisfacer a un consumidor más selecto. “Lo que hacen las marcas globales y multinacionales como Lala es empezar a desarrollar productos de nicho para satisfacer a consumidores más exigentes, pero aún no les genera un impacto muy fuerte en ventas ni en rentabilidad”, explica Manuel Valencia, director de la carrera de Negocios Internacionales del Instituto Tecnológico de Monterrey.
En los últimos cinco años, el consumo de leche orgánica en el mundo ha crecido 48.7%, según la información proporcionada por Euromonitor. Mientras que el consumo de leche ordinaria apenas creció 5% en el mundo y decreció 12.5% en México durante el mismo periodo, de acuerdo con la consultora.
Esta tendencia parece que seguirá evolucionando en los próximos cinco años, según Market Insights en Latinoamérica, empresa que realiza reportes para más de 300 empresas de alimentos y bebidas.
Manufactura.mx Nota del editor: El artículo completo lo puedes consultar en la edición 254 de la revista Manufactura, Tendencias de la nueva economía industrial, correspondiente a febrero de 2017.