IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad De México
Llegó la noche de sentencia y entre el nerviosismo de la competencia, Verónica Castro y Miguel Bosé bailan “La Chona” de los Tucanes de Tijuana, mientras que la cantante mexicana María León, que fue la coach invitada, amenizó la noche cantando en el programa.
Como en todos los programas, además de los concursantes, siempre es invitado un “talentito” (un niño demuestra sus habilidades en cualquier disciplina) y en esta ocasión, Antonio Vázquez, un niño de 11 años, subió al escenario para tocar el acordeón.
Al término de su actuación, la producción invitó a los jueces a bailar “La Chona”, siendo la pareja que más demostró sus dotes de baile la conformada por Bosé y Verónica, que con peculiares pasos de baile, arrancaron los aplausos.
Desde que inició la transmisión de “Pequeños gigantes”, el nerviosismo se notaba en los participantes, ya que sabían que tenían que presentar una buena actuación para sumar puntos y salvarse de la sentencia.
“Están muy nerviosos los chicos, lo notamos desde el primer equipo, están jugando a ser grandes ya, esto ya no es un jueguito como el primer programa, aquí ya se están dando cuenta que el día de mañana ya no van a estar en este concurso”, dijo Karol Sevilla en entrevista.
En esta ocasión, los coaches Verónica Castro, Miguel Bosé, Albertano, Karol Sevilla y María León, quienes entre las cosas que califican se encuentra el carisma, el canto y el baile, vieron que el desempeño de los niños era merecedor de una alta calificación, por lo que muchos de ellos daban el 10 a los participantes.
“Las calificaciones han ido subiendo porque las criaturas han ido evolucionando a lo largo de la contienda. Ellos son los que tienen que esforzarse para no estar conformes con lo que están haciendo. Lo más difícil no es llegar arriba, es mantenerse”, indicó Albertano.
Hubo también bajas calificaciones, pero de acuerdo al jurado, eso no es para que se desanimen los participantes, sino para que se den cuenta de sus errores.
“Para eso son las malas calificaciones, uno no está demeritando lo que están haciendo, ni su trabajo, simplemente es para que se den cuenta que tiene que echarle ganas para el día de mañana”, dijo Karol.
Pero a pesar de todo el esfuerzo de los concursantes, el momento de decidir quién estaba sentenciado llegó y para sorpresa de muchos todos los equipos quedaron sentenciados, excepto Giovani y sus saca chispas, que quedaron en primer lugar.
La presión y el impacto de ser descalificados podría causar un altibajo emocional en los concursantes que son niños, por esa razón que sus entrenadores hablan con ellos para evitarlo.
“Los ‘coach’ siempre les dicen que si salen del programa no significa que los sueños se van a ir abajo, sino que habrán muchos más retos en la vida y que tienen que ser mucho más fuertes cada día, que esto es una prueba para lo que viene y a lo que se quieren dedicar”, comentó Karol.