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Unión Europea
En una sofocante Bruselas, los jefes de Gobierno y de Estado de la UE se dan cita en la cumbre europea. La nueva estrella francesa, Emmanuel Macron, se encargará de levantar los ánimos tras el batacazo con el “Brexit“.
La Unión Europea (UE) parece estar saliendo del abismo. Por lo menos, eso cree el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk: la clara victoria electoral del europeísta francés, Emmanuel Macron, y la relativa derrota electoral de los conservadores británicos parecen ser claras señales de ello. Hasta ahora, la primera ministra británica, Theresa May, abogaba por el “Brexit” duro, una clara ruptura con la UE.
Las negociaciones para la salida de la UE ya comenzaron. Los gobernantes europeos esperan una señal de Londres con respecto a los tres millones de ciudadanos de la UE residentes en Gran Bretaña. May dijo en Bruselas que “explicaremos cómo queremos proteger los derechos de los ciudadanos de la UE y los británicos”. Sin embargo, la cuestión es qué valor tienen las declaraciones de una primera ministra políticamente debilitada. Ya se habla de “gobierno zombi” en Londres.
Entretanto comenzó la lucha por el botín del “Brexit”. Las autoridades de la UE con sede en Londres, el Comité Europeo de Supervisores Bancarios y Agencia Europea de Medicamentos, se trasladarán al continente europeo. Todos los países de la UE las quieren.
La canciller alemana, Angela Merkel, dijo en Bruselas que ve “un ambiente optimista” y para ella “el proceso de futuro tiene preferencia ante las negociaciones con Gran Bretaña. La atención se debe centrar en los 27 Estados miembros”.
Así opina también Emmanuel Macron, quien también acudió a la cumbre y es considerado la nueva esperanza de la UE: “Deseo que regresáramos al espíritu cooperativo que reinaba entre Francois Mitterrand y Helmut Kohl”, escribió el presidente francés en un entrevista publicada en varios diarios europeos. Si no, advierte Macron, Europa se verá amenzada por el colapso. Además, en Bruselas expresó querer tomar en serio los miedos de los ciudadanos ante la globalización. Europa tiene que “protegerse”, “de los que no acatan las normas”, dijo Macron. El motivo de esta declaración es el debate con China por las exportaciones de acero y la cuestión de si China puede adquirir empresas alemanas, pero al revés, no.
En Bruselas y entre los miembros de la UE parece que existe un nuevo consenso y más autodeterminación. La cuestión es hasta qué punto funcionará. Los atentados, muchos de motivación islamista, han originado que los Estados, por lo menos emocionalmente, se hayan acercado. La cooperación en tema de defensa se ha convertido en un objetivo común. Pero también, la inmigración no deseada es otro gran tema de debate para la UE, donde las opiniones difieren en ciertos puntos. Los países del este europeo están totalmente en contra de acoger a los refugiados llegados a Italia y Grecia. Tampoco parece tener muy buena estrella el derecho de asilo en común.
La nueva estrella europea, Macron, quiere que la eurozona se siga desarrollando y pretende contar para ello con el aliado vecino, Alemania. Desea un ministro de Finanzas y un presupuesto común europeo. Merkel, por su parte, comenta los ambiciosos planes de París evitando ir al grano y explicó que habría que reflexionar sobre el tema.
Donald Tusk piensa también sobre el futuro de la UE, de 28 miembros. Los británicos le preguntaron si en algún momento podrían volver, explicó este antes de la cumbre. Y la respuesta fue: “You may say I’m a dreamer, but I’m not the only one” (Puedes pensar que soy un soñador, pero no soy el único), haciendo referencia a la canción de John Lennon, “Imagine” (Imagina que…).www.dw.com
