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Estados Unidos
Will Smith (48) destaca de entre sus colegas de Hollywood por diversas razónes. A lo largo de los años no sólo ha logrado progresar y desarrollarse como actor y cantante (de hecho, en dos ocasiones fue nominado al Premio Oscar para el mejor actor, y asimismo obtuvo cinco nominaciones al Globo de Oro), sino también se ha hecho conocer como una persona sencilla, simpática y muy apegada a la familia. Todo esto ha hecho que sus fanáticos se cuenten por millones, y donde quiera que vaya, siempre causa furor.
La vida feliz de Will y su familia
Además de una prominente carrera en el mundo del espectáculo, Will se realiza de maravilla como padre y esposo. Desde hace casi veinte años sigue casado con la misma mujer (la también actriz, Jada Pinkett-Smith (45)), con la que tiene dos de sus tres hijos (su primogénito, Trey (24), nació fruto de su relación con Sheree Zampino): el hijo Jaden (18) y la hija Willow (16).
Los hijos son lo más importante
Los tres jóvenes definitivamente han heredado mucho de sus progenitores. Tanto Jada, como su esposo, a menudo hablaban sobre la crianza de sus hijos, a los que decidieron formar sin usar los métodos típicos de la mayoría de los padres. Por todo ello, hoy en día pueden presumir de una excelente relación familiar con todos ellos. Puesto que nunca les habían puesto reglas ni límites, sobre todo sus hijos menores no han tenido por qué rebelarse y no les causaron ningunos problemas de los que tanto suelen quejarse las familias.
¿Quién es Willow?
La que desde el principio de su vida se encontraba en el punto de mira del público fue la benjamina del clan, Willow, cuyo nacimiento marcó toda una nueva etapa en la vida de sus seres queridos. Mientras que la mayoría de la gente se acuerdan de ella cuando, de pequeñita, su papá la llevaba en brazos a todas partes y orgullosamente posaba con ella a los fotógrafos, no cabe duda de que ya no es más una nena…
Dado que la joven ha tenido la suerte de crecer rodeada de las personas relacionadas con Hollywood y tomar ejemplo de las habilidades de sus padres, no es de extrañar que sea igual de talentosa. A pesar de su corta edad (recordemos que sólo tiene 16 años), podemos decir sin ambages que había logrado mucho más que los niños de su misma edad… y no para todo ello necesitaba el apoyo de sus padres.
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Ante todo, hay que destacar que desde pequeña ha manifestado mucho interés en la música, la actuación y… la moda. Influenciada por la madre (dicho sea de paso, una de las intérpretes más hermosas del Hollywood actual), muchas veces se dejaba fotografiar vestida de una forma peculiar que, por lo general, provocaba el asombro de las masas. No obstante, esto no es lo único que le hace destacar.
Además, Willow sigue demostrando mucho talento para cantar. Todavía en otoño del año 2010 fue lanzado su primer sencillo titulado Whip My Hair que terminó subiendo en la posición 11 en la lista de Billboard Hot 100, y se unió a la discográfica Roc Nation, dirigida por Jay Z. Cabe destacar que incluso el vídeo para su primera canción fue nominado al Premio BET Award para el mejor vídeoclip del año. Pero ni siquiera aquí terminan sus campos de interés y éxitos.
La hija de Will también puede jactarse de un debut en la gran pantalla. Cuando tenía 7 años, junto con Jaden le acompañó a su famoso padre en el rodaje de la película Soy leyenda, y no mucho más tarde prestó su voz a uno de los personajes del dibujo animado Madagascar 2. Lo más emblemático de ella, sin embargo, sigue siendo su impresionante intuición de la moda y su característica forma de vestir. De hecho, ¡Willow logró impresionar con ella incluso al mismísimo Karl Lagerfeld! Fuente: paraloscuriosos.com
