- La Asociación de Empresarios e Industriales del Estado de México reprocha los malos servicios; prevén recuperación hasta tercer bimestre del año.
En el sector secundario no se vislumbran signos de recuperación hasta mayo, situación a la que hay que sumar el incremento en los servicios públicos, que son caros e ineficientes, lamentó el vicepresidente de la Asociación de Empresarios e Industriales del Estado de México (Adeiem), Teodoro Martínez Castillo, quien consideró que las autoridades deben mejorar los servicios y ser más flexibles ante la carga fiscal que enfrenta la iniciativa privada.
Refirió que este organismo agrupa a compañías que dan empleo a un millón 800 mil mexiquenses con presencia en todos los parques industriales en la entidad y aseguró que han hecho serios esfuerzos por no “adelgazar” la planta laboral, sino conservar las fuentes de trabajo.
No obstante, estimó que el sector manufacturero tendrá una “cuesta de enero” prolongada, no será sólo de enero y febrero, debido a que existe inestabilidad en el precio de los productos y está costando mucho traer los productos del exterior.
“Hay insumos que tardan en llegar hasta 90 días y tenemos que pagar de inmediato”, destacó el empresario, quien hizo énfasis en los problemas de liquidez al que se enfrentan muchas compañías. Lo anterior, porque los energéticos se están incrementando, al igual que los impuestos locales.
Por ello, insistió en que se necesita contar con el respaldo de las autoridades, ya que el panorama que es complicado y no se observa mejora en la prestación de servicios públicos, situación que también provoca que aumenten los costos de operación y que exista un impacto en el consumidor final.
Teodoro Martínez resaltó que al sector empresarial le queda claro que deben pagarse impuestos, sin embargo, no existe flexibilidad alguna para los empresarios, existe mucha presión para que se cumpla con la carga impositiva y lo peor es que no se percibe una mejora en los servicios públicos, por lo que no existe reciprocidad en lo que se aporta.
El representante empresarial subrayó que también debe tomarse en cuenta que hay una pérdida significativa del poder adquisitivo, por lo que “si la gente no tiene dinero, no hay compra y se estanca la producción”. Por tanto, el efecto de la inflación también repercute en los consumidores y frena la industria, de ahí que el inicio de año no es alentador para el sector manufacturero.