IMPULSO/Agencia SUN
Oaxaca
Tras acusaciones de mandos regionales de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en contra de la etnia triqui por presuntamente proteger cultivos de enervantes, indígenas mixtecos de la comunidad de San Miguel del Progreso, perteneciente al municipio Heroica Ciudad de Tlaxiaco, mantienen retenidos a unos 100 elementos del Ejército Mexicano. Sedena se retractó posteriormente de las acusaciones.
Ello debido a que consideran que instalarán “de manera ilegal” una base de operaciones militares en dicha zona, además de que “no acreditaron su estancia en el lugar”, según informaron los pobladores y confirmaron reportes de la Policía Estatal.
“Los habitantes temen por su seguridad, ya que en las últimas fechas el Ejército ha estado incursionando en comunidades indígenas, esto para llevar a cabo una militarización y así poder concretar el despojo de tierras para favorecer a las mineras”, informaron en un breve comunicado.
El pasado 15 de marzo, la 8 Región Militar, con sede en Santa María Ixcotel, Oaxaca, dio a conocer que fueron atacados helicópteros del Ejército cuando pretendían destruir plantíos de amapola en la zona triqui del estado y que indígenas de esa etnia se oponían a la erradicación; este martes los mandos recularon y se deslindaron de esos señalamientos.