José Moisés de la Luz G.
Mientras en la mayoría de los países del mundo la pandemia fue tomada en serio, en México donde tuvimos la enorme oportunidad de tomar ventaja y salir adelante mediante las experiencias que observábamos en países europeos, parece ser que esos días de ventaja que teníamos solamente sirvieron para el chacoteo y cultivar la desinformación.
El sitio propicio fue el sustituto moderno de los antiguos lavaderos públicos, el Facebook ayudado en todo momento por las bondades del WhatsApp, ambos llenos de “expertos analistas” en todos los temas, donde surgen los peores chismes, las versiones más malintencionadas y se propaga la desinformación con mucha rapidez.
Aberrantes teorías de conspiraciones incluso extraterrestres, además de las ya muy aplaudidas de los chinos contra los gringos; inundan las redes sociales, conjeturas y el más puro onanismo mental hacen más abundante el contenido de lo que se difunde.
Es así que en las últimas semanas se ha señalado que las acciones del gobierno estarían encaminadas a dañar, se descalifica la sanitización, se exponen más teorías de destrucción.
Mientras todo lo anterior ocurre lo verdaderamente importante, el cuidado de la salud es ignorado por completo, sobre todo en lugares donde no se tiene un nivel cultural y educativo ni siquiera mediano; tal es el caso de lugares como los municipios que se encuentran al norte de la capital del estado de México.
Las buenas políticas de comunicación implementadas por el gobierno de Jiquipilco y Marisol Gonzalez Torres, nada más no son entendidas por sus gobernados, comunidades enteras se revuelcan en la ignorancia y el desprecio por la información que el ayuntamiento les provee.
En Temoaya los tibios intentos de difusión de la alcaldesa Brígida Rivera son un auténtico fracaso, en Ixtlahuaca ni hablar, entre la incapacidad del alcalde y la necedad de la gente, Ixtlahuaca es un municipio donde el riesgo de contagio es latente.
El colmo de la ignorancia se dio en Otzolotepec, municipio del que quien esto escribe puede hablar con todo conocimiento, por la sencilla razón de que soy originario y vecino de él y en algún momento, hace mucho tiempo como parte de la experiencia como comunicador, estuve al frente de la oficina de comunicación social.
Pues bien, una vez más lo han hecho, la comunidad que representa y ha representado en las últimas décadas un verdadero lastre para Otzolotepec, lo volvió a hacer, desestabilizar no solo al gobierno de Erika Sevilla, ha puesto en riesgo al municipio y a toda la región.
No exagero al decir que sería preferible que esa comunidad llamada San Mateo Capulhuac, lograra su independencia o la desincorporación de Otzolotepec, eso evitaría problemas grandes y graves al municipio y también nos evitaría la VERGÜENZA de ser noticia internacional por exhibir de manera tan grotesca su insultante ignorancia, así como las malas intenciones de las mentes enfermas que les manipulan.
No se trata de estar o no de acuerdo con la administración municipal, eso es otro asunto que merece atención especializada tampoco se trata de ser amigos o aliados de la alcaldesa Erika Sevilla, a quien se juzga de forma muy severa, dado que para emitir un juicio a cerca de la decisión de no sanitizar San Mateo Capulhuac, habría que conocer con qué tipo de rufianes está tratando; lo que no sugiere ni de lejos que sea correcto hacer excepciones como la de excluir de las labores de sanitización a una comunidad, esto no es viable ni jurídicamente, no es moral, ni ético
Hace años la citada comunidad era considerada un lugar de gente buena y trabajadora, sin embargo, en las últimas décadas en ese lugar ha permeado el interés mal sano; quienes manipulan y adoctrinan a la comunidad buscan a toda costa el beneficio, viendo al ayuntamiento, sea cual sea su extracción como una apetecible ubre de la que no hay que dejar de colgarse, reciben apoyos municipales, programas sociales estatales y federales pero ese dinero en efectivo jamás lo gastan en el municipio, es decir tienen bien aprendido como se usa el azadón (todo para acá) pero a la hora de retribuir, nunca por ninguna vía, son malagradecidos.
Ha sido siempre una constante la cantaleta, manipuladora y chantajista por lo mismo una bajeza, Es que no nos dan porque “NOS DICEN QUE SOMOS INDIOS” y bien que les ha funcionado el numerito, sin embargo, volteando hacia atrás es fácil recordar episodios que han dejado mal parado al municipio, como aquella vez que un grupo de jóvenes de esa comunidad, lograron un apoyo por parte de una embajada para un proyecto de riego agrícola y la turba rabiosa con campanadas y cohetones interrumpieron la entrega del apoyo, cuestionando quienes eran y que hacían y por qué el apoyo no era para toda la comunidad, envidia, mezquindad por decir lo menos, para vergüenzas no gana uno o también recuerdo cuando el entonces alcalde Joaquín Colín, les habría de construir una ESCUELA SECUNDARIA si señor UNA ESCUELA SECUNDARIA y los inadaptados impidieron que se construyera en el terreno señalado por que ahí jugaban futbol y se embriagaban, orillando a que el ayuntamiento les comprara otro terreno.
En ese lugar no se puede caminar libremente, basta con que a alguien se le ocurra señalar que se trata de un ladrón o algo sospechoso para que una multitud inicie el linchamiento, ejemplos hay muchos; además tampoco se puede caminar libremente por que es un lugar en donde la gente aún defeca y mea donde le place y siempre les place en la vía pública.
El pasado viernes y madrugada del sábado el episodio ha sido más que vergonzante, cualquier descripción queda corta al ver el video donde es destruida una patrulla, la inconciencia, la ignorancia, la mala leche y todo lo malo que un ser humano pueda generar, se ve en esas escenas que avergüenzan a la gente bien nacida y enorgullecen a quienes perpetraron esa infamia.
Seguros de la veracidad y lo genuino de su reclamo acuden al palacio municipal a montar el teatro de lo absurdo, señalan con dedo flamígero, la alcaldesa solo apela al sentido común y termina dando la salida a tantos individuos manipulados, dejando claro que allá en su comunidad serrana no habrá sanitización, pero aquello no termina, ahora quieren saber cuánto gana el cuerpo edilicio y exigen que no cobren su salario, luego piden una unidad especializada para atender casos de covid-19 exclusiva para San mateo Capulhuac, si de inicio su movimiento era una aberración conforme avanzaba el tiempo y los dos ex regidores Juanelo Levario y Bartolo Santiago seguían azuzando a un merolico para que atizara aún más.
Lo más atroz no es lo que hicieron, que por cierto parece que quedará impune el daño al patrimonio del municipio, lo verdaderamente grave es lo que viene, el mal ejemplo cunde, en Almoloya de Juárez ya se vivió algo muy semejante, peor todavía lo que se espera en Temoaya donde ya circulan versiones de que el agua lo que será contaminada, otra muestra de que es peligrosa la pandemia, sin embargo, más, mucho más es la ignorancia.
Habría que pedir al gobierno estatal, implementar acciones enérgicas, esta vez no se trata de garantizar gobernabilidad, se requiere se tomen medidas para evitar contagios masivos, el sábado pasado en Otzolotepec se concentraron más de trescientos individuos que ignoraron cualquier medida de prevención y peor aún rechazaron la sanitización de su comunidad donde ya hubo casos de infectados así como defunciones, allá no quien que sanitización, sin embargo ellos los representantes de la ignorancia, los altamente posibles portadores de covid -19, ellos si podrán andar libremente, poniendo en grave riesgo a la gente no solo de Otzolotepec, no se puede perder de vista que de esas comunidades sale mucha gente a trabajar a la ciudad de México y a Toluca, entre otros lugares a trabajar como empleada domésticas, estibadores, así como a comerciar diferentes mercancías.
En San Mateo Capulhuac existen casos activos de Covid- 19 y no hay acciones que prevengan más contagios por que los habitantes de esa comunidad han rechazado cualquier acción, esta comunidad es sin duda una bomba y si no AL TIEMPO.
