Clima político enrarecido y el “mero” que no levanta
Luis Loaiza
Yo mero quiero ser su candidato, gritó Meade en Tlalnepantla tras solicitar el apoyo de los “meros” mexiquenses en el consejo que el CEN del PRI celebrará el próximo domingo durante el día 60 de su precampaña, a la cual asistió el gobernador Alfredo Del Mazo en su calidad de militante ante cientos de priistas de los municipios de la región.
El abanderado tricolor a la Presidencia aseguró que son más los que quieren un México mejor y en ello estriba la seguridad de su triunfo.
Con significativas ausencias de los grandes actores del priismo estatal, Meade refrendó la serie de compromisos que ha ofertado a la militancia, pero enfatizó que, en su carácter “de externo”, necesita de los “meros” de Ecatepec, Tlalne, Tultitlán, etc.
Obvio, en las redes sociales han hecho escarnio de la forma populista que quiere adoptar el académico tricolor, pues se nota demasiado la improvisación de su lenguaje y más que no permee en el ánimo de la militancia priista el querer copiar los berrinches foxistas y su “YA”, es una mala, muy mala estrategia.
Frío saludo a Arturo Montiel y todo lo contrario con Eruviel Ávila, todo como parte del protocolo tricolor.
Por cierto que algo que me llamó la atención es que el alcalde de Ecatepec, Indalecio Ríos, fuera el único de la cargada ecatepeka, que en la porra lo hacía con la mano izquierda y no con la derecha como todos, nunca dije que fuera subliminal el asunto, sólo dije que me llamó la atención.
Hablando más de Ecatepec, parece más que conformado el Todos Unidos Contra Morena (TUCOM) y será una guerra épica contra todo lo que huele a los “prietos”, como dijera el líder nacional del PRI, la batería pesada está preparando sus cargas sobre el enemigo a vencer:
Fernando Vilchis, sobre quien se desatará una guerra sin cuartel para tratar de bajar la euforia de los habitantes de Ecatepec hacia el morenismo o, mejor dicho, hacia el amlismo.
La guerra intestina ha fracasado hasta el momento, ni la observación del Órgano de Honor y Justicia, ni las descalificaciones evitaron que el GAP que comanda Higinio Martínez Miranda impulsaran al ex líder uprecista al máximo escaño local, por lo menos en la precandidatura.
En 2016, la guerra sucia le ocasionó a José Luis Gutiérrez Cureño y al PRD perder poco más de 80 mil votos, que al final fue la diferencia para que perdiera la elección ante Pablo Bedolla López del PRI.
Hoy, los estrategas del PRI, del PAN-PRD y del mismo Gobierno le apuestan a una oleada negra que logre afectar la imagen del virtual candidato Morenista a la Alcaldía del municipio más poblado de Latinoamérica.
Y es que no es solo la presidencia municipal la que está en juego, la idea es evitar en lo posible que haya mucha votación hacia AMLO y hacia las diputaciones locales, pues este solo municipio alberga el 10 por ciento de la próxima legislatura: cinco posiciones.
En las recientes encuestas, Morena le saca casi 20 puntos de ventaja al priismo, que, dicho sea de paso, se coloca en un tercer lugar en las preferencias del electorado, superado ya por el frente conformado por el PAN-PRD-MC, que lleva como precandidato a Octavio Martínez Vargas y su FPI, asociación emergida de la Nueva Izquierda y que sufrió ya un descalabro en la pasada elección local.
Por cierto, este sábado pasado, se definieron las precandidaturas a los distritos locales del frente y entre las sorpresas, se encuentra el hasta ese día precandidato a la Alcaldía por el partido Vía Radical, Mario Iván Bernal, quien amaneció el domingo como precandidato a diputado local por el Distrito 42, lo que suma a un importante sector de ese distrito en favor del frente y en detrimento de Morena y del PRI que lleva a Inocencio Chávez como aspirante a reelegirse en esa curul.
Hablando de reelecciones, también el sábado se aprobó que el alcalde de Neza, Juan Hugo de la Rosa García, busque reelegirse al cargo para dar continuidad a su plan de gobierno.
