Por Luis Miguel Loaiza
Morena no entiende lo del viejo odre y el vino nuevo
La teología y la filosofía coinciden en que no puede entrar algo nuevo si no sacas lo viejo, pero en política pareciera que la polilla acarrea más interés que los nuevos proyectos y lamentablemente a la directriz de Morena no le ha caído el vente de que hay que acabar con los viejos vicios para dar paso a una evolución.
Se fundó de residuos del PRI y de otros partidos, ya se estableció como partido y gobierna actualmente una población muy importante, pero siguen conservando los viejos moldes priistas que han llevado a ese partido a una casi extensión.
En la entidad mexiquense, no han entendido que el tiempo de Higinio Martínez ya pasó, de verdad en algún momento los políticos deberían retirarse, pero Martínez Miranda debió hacerlo hace medio siglo, dicho de otro modo los fósiles solo son carga en un plantel educativo y los obsoletos lo son para la política.
Para que Morena no tenga un fin anticipado debe voltear a la cantera y deshacerse de lo inservible, en la aministración de Arturo Montiel, hizo muchos cambios en su gabinete y para dar juego a todos los grupos les decía: “ya comiste, deja que otros se sienten a la mesa”, así en Morena, ya se enriquecieron, es tiempo de dar paso a las siguientes generaciones.
Algo que es seguro es que Higinio Martínez va a vender cara su derrota y tratará de seguir manipulando desde lo oscurito y a través de sus operadores y de sus diputados, pero por sanidad se debe retirar a su rancho y permitir que el proceso de Morena se realice sin la presión suya, pues es menester acabar con las canonjías del GAP y de su tlatoani.
Como nueva fecha para el congreso se dijo que la primer semana de septiembre, pero la presión que se ejerce podría desencadenar un fraticidio, por ello, se maneja sobre seguro y tras agotar las pláticas de negociación.
Delfina a la candidatura, es quizás lo único seguro que hay ahora y si se duermen la campaña de desprestigio podría entorpecer aun más el proceso interno y los trabajos de organización para la campaña del próximo año.
Si logran bajar al grupo Texcoco, vendrá el reparto de despojos y la guerra entre buitres será tremenda, pero ya son muchos años de control de una sola persona y no se ve por donde.
Finalmente las posibles alianzas se manejan más por ideas y necesidad que por compromiso con el pueblo, ahora mismo los partidos satélite se cotizan a gran precio gracias a esa pobre importancia electoral que, abonando a la causa, podría significarle el triunfo o la derrota a los principales contendientes: PRI-PAN-PRD-¿? Vs. Morena-PT- ¿?, esto creyendo que el PVEM se mantenga en su idea de ir solos en la ontienda de la mano de su líder Coutolec…Y YA.
