IMPULSO/Luis Loaiza
Hechos trágicos enmarcan el proceso electoral
Sin duda alguna, el actual proceso electoral, es ya un fenómeno inusual en la historia contemporánea de México y no solo por el número de puestos a elección popular en disputa, sino por los hechos trágicos que enmarcan el desarrollo de las precampañas y campañas.
Para que usted tenga una idea clara le expongo:
Durante el presente proceso electoral suman ya 104 políticos asesinados dentro o cerca del presente proceso electoral que culminará el próximo 1 de julio. Una cifra, sin duda, alarmante, pues nunca en la historia se había presentado una ola tal de atentados contra quienes buscan un puesto de elección popular.
De estos, según cifras de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), se detalla que del total de políticos asesinados, 41 aspiraban a un cargo de elección y, de ese total, 28 eran precandidatos y 13 estaban registrados a puestos de elección.
De los 110 actores políticos asesinados 15 eran mujeres, pero con las recientes víctimas del fin de semana la cifra de candidatas asesinadas se incrementa a 17, mientras que las otras 87 correspondió a personas del género masculino.
Tan solo entre el 8 y el 26 de mayo hubo 52 ataques, principalmente, contra los miembros del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) partido del candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, quien lidera las encuestas.
Del PRD se han reportado oficialmente 17 candidatos asesinados, según reconoció su líder nacional Manuel Granados
Según las instituciones policiales, el 83 por ciento de los hechos fueron ejecutados por el crimen organizado. Las zonas con mayor riesgo son los estados de Guerrero, Oaxaca, Jalisco, Michoacán, Colima y Nayarit, lugares donde al menos 50 políticos fueron asesinados, a los cuales se suma este fin de semana Puebla con dos casos recientes.
La elección, a todas luces atípica por el número de agresiones contra políticos, militantes y periodistas, obligó a que cerca de mil precandidatos y candidatos se retiraran de la contienda ante el temor de sufrir algún atentado contra su persona o de su familia.
Pero hay otro hecho que poco se comenta y de lo cual expongo dos ejemplos recientes, algo llamado desvío de recursos y que solo se ve con la muerte de algunas personas. El primero que menciono fue en Tecámac, Estado de México, donde dos policías municipales comisionados a cuidar de la candidata a la alcaldía por el PRI, Rocío Díaz Montoya, fueron levantados y posteriormente asesinados, cuando su labor nada tendría que ver con el cuidar a candidatos y especialmente que fueron comisionados a estar afuera de la casa de la candidata Díaz Montoya, caso que se va al archivo, porque nadie toma la batuta para denunciar el desvío del recurso humano y material en favor de un partido político y en detrimento de la ciudadanía.
El otro más reciente se descubrió con el asesinato de María del Sol Cruz Jarquín, periodista asesinada en Juchitán, quien se desempeñaba como parte del equipo de comunicación social de la Secretaría de Asuntos Indígenas de Oaxaca y que se encontraba comisionada cubriendo la campaña para presidente municipal de Hageo Montero López, hermano del titular de la SAI. Lo anterior evidencia uso de recursos públicos para campaña del PRI.
Pero no queda ahí pues también cuatro reporteros han perdido la vida sin que se pueda desligar, por lo menos dos de ellos del presente proceso electoral.
Por su parte en la página del Comité Ciudadano para la Observación Electoral hasta el 8 de mayo se contabilizó 305 agresiones directas e indirectas, en contra de actores políticos y familiares durante estas elecciones.
Elección atípica y parsimonia de las autoridades electorales y judiciales y todavía faltan 27 días para la elección, cuántas víctimas más hacen falta para que el gobierno implemente operativos de seguridad? Eso ni usted ni yo lo determinamos y me atrevo a decir, con pesar, que el día 1 de julio podría haber varias muertes que lamentar si esto sigue así, espero equivocarme, pero normalmente no sucede…Y YA
DATO
La elección se dará en 30 estados y estarán en juego 9 mil puestos de elección popular
