IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad de México
- Sea desde la fotografía o la literatura, lo que mueve a Graciela Iturbide y a Elena Poniatowska es la pasión por la vida y el deseo de seguir creando.
Ambas fueron homenajeadas en la Feria Internacional del Libro de Oaxaca 2017, donde aseguraron que tienen muchas historias por contar desde la imagen y la palabra. Iturbide siempre ha estado cerca de Oaxaca a través de retratar su vida y por su amistad con Francisco Toledo.
Es célebre su foto conocida como “La Señora de las Iguanas o La Medusa de Juchitán”, una pieza que forma parte de esta retrospectiva que la lleva a pensar en el destino de su acervo, que se conforma de muchísimos materiales y que ella mantiene bien organizado y preservado. Elena Poniatowska, al recibir el homenaje y conversar con la poeta Natalia Toledo y el escritor Fabrizio Mejía Madrid, dijo:
“Quién soy, cómo soy, yo no sabía que quería hacer conmigo misma, qué clase de cosa iba a salir de adentro. Durante años decía: ‘como dice Carlos Monsiváis’, ‘como dice Sergio Pitol’, ‘cómo dice Guillermo Haro’, no me sentía segura de sacar mis propias opiniones”.
Poniatowska celebró su cercanía con Oaxaca a través de dos oaxaqueños con los que tuvo contacto y fueron protagonistas de dos de sus novelas: la soldadera Jesusa Palancares y el ferrocarrilero Demetrio Vallejo, quienes la acercaron a esta tierra y a otras realidades.