IMPULSO/ Edición Web
La Habana
Eric Schmidt, presidente ejecutivo de Google, firmó en La Habana un convenio con Mayra Arevich, titular del monopolio estatal de telecomunicaciones cubano Etecsa, que permitirá a los cubanos tener mejores velocidades en los servicios de Google a través del servicio Google Global Caché. Desde 2014, cuando Raúl Castro y Barack Obama comenzaron el diálogo para reconstruir las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, Google se ha mostrado muy interesado en entrar a la isla.
En Cuba el acceso a internet en los domicilios está prohibido y sólo es posible para profesionales como periodistas, abogados o académicos con una autorización gubernamental, aunque desde julio de 2015 se han habilitado por toda la isla cientos de zonas Wi-Fi en lugares públicos a unos dos dólares la hora de conexión.
Cuba es uno de los países con menor penetración de Internet y también posee velocidades muy bajas para los estándares actuales. Para entender el por qué, hace falta mirar su infraestructura. De acuerdo con TeleGeography, el único cable de fibra submarino que conecta a Cuba es el ALBA-1, que por una parte conecta a la isla con Jamaica y por el otro con Venezuela.
Google Global Caché forma parte de la plataforma de entrega de contenido de Google. Básicamente se trata de servidores pequeños en la red de los operadores y proveedores de Internet que replican los contenidos alojados en los Data Centers de Google, poniendo así más cerca físicamente los servicios de Google de los cubanos y cortando el tiempo de solicitud-entrega de la información.
El primer sitio donde probó suerte la empresa fue en el estudio del artista plástico Alexis Leyva Kcho, donde inauguraron una especie de café-Internet gratuito con 15 Chromebooks, Cardboars y otros productos de la empresa con Internet más veloz que el disponible en los 1.006 puntos de conexión públicos donde al día se conectan 250.000 personas.
Etecsa también tiene un convenio con Huawei de fibra óptica para el casco histórico de La Habana,donde a principios del año anunciaron un plan piloto de conexión para 200 hogares de profesionistas con la autorización gubernamental.
Aunque desde hace varios años los cubanos se podían conectar en salas de navegación, a precios más caros que ahora, ha sido la instalación de las zonas WiFi en espacios públicos desde el año pasado lo que ha multiplicado las opciones de conectividad de la población cubana, que anhela un acceso más fácil a la red. Gracias a esas zonas, Cuba llegó el año pasado a los casi 4 millones de usuarios de internet, un 20% más que el año anterior.
Con información de Hipertextual y EFE