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Ciudad de México
Después de que no han tenido espacio de trabajo durante más de tres meses, la Galería Arroniz inaugurará en febrero una nueva sede, allí mismo, en la Roma, aunque en Tabasco No. 198.
Ganadora este 2017 en la categoría Galerías del Premio Ciudad de México, que reconoce iniciativas valiosas para la capital (competían con Kurimanzutto y Arredondo Arozarena), Arroniz continuará con su trabajo de representar a artistas contemporáneos, de nuevas generaciones, con propuestas que contemplan las diversas expresiones del arte actual.
Su anterior sede tiene varias grietas, el exterior del inmueble también. Aunque se sabe que no tiene daños estructurales, tendrán que hacerse trabajos para reforzar el inmueble.
“Varios ingenieros concluyeron que el daño no es fatal, pero que se tiene que hacer un arreglo, un reforzamiento, no sé exactamente qué”, cuenta Arroniz.
El galerista recuerda que desde el temblor del siete de septiembre había notado que se había movido bastante el edificio y que había ciertas grietas que le llamaban la atención, entonces, tras una revisión, un ingeniero determinó que estaba bien. “El plan era seguir porque en este enero nos íbamos a mudar a un espacio nuevo, el plan era cambiar un espacio por el otro.”
“Sin embargo, a raíz del sismo nos tuvimos que salir de un día para otro. En la zona, alrededor de 10 cuadras, es el único edificio que quedó así de delicado, aunque se va a rescatar”.
Algunas obras que estaban en la galería, montadas ya para las dos exposiciones que iban a abrir en el marco del Gallery Weekend, se dañaron; todas las que estaban allí almacenadas, junto con las que tenían en otra bodega, tuvieron que trasladarse.
“El espacio de trabajo lo perdimos de un día para otro, somos la única galería que tuvo que desalojar su espacio, algunos tuvieron que arreglar paredes, pero nada tan largo en tiempo como para nosotros.
Rentábamos una bodega en la Roma Sur que también se vio afectada, allí fue peor. Galerías como Marso, Machete, Proyectos Monclova, Estudio Panic nos ayudaron, nos prestaron desde mano para cargar y desalojar hasta espacios de almacenaje.
Artistas de la galería ayudaron mucho y poco a poco solucionamos ese primer tema. Amigos de la galería Machete y Domitila Bedel nos ofrecieron un espacio que era de un restaurante, en Puebla 109, donde hicimos una exposición que se llamó ‘Temporal. Referencias al espacio’.
Ahora vamos a poder relocalizarnos, pero con la gran dificultad de los gastos con el banco que implica”, explicó Arroniz.Unas semanas después del sismo, varios galeristas se reunieron para hablar de sus experiencias. Algo cambió en el gremio, sostiene Arroniz: “Recibí muchas llamadas de apoyo, Ethra, OMR, Hilario Galguera, Patricia Conde, hicimos un ‘pop-up shop’ en el garage de la galería Pablo Goebel con una exposición de Agustín González…
En el momento en que la gente se fue enterando, recibimos oferta de ayuda de prácticamente todos, fue muy conmovedor descubrir lo que representamos para el gremio, el valor que tenemos como espacio cultural.
Eso nos impulsó a seguir adelante y, ahora, aunque tengamos que trabajar para alguien más, vamos a seguir abiertos en este nuevo espacio”.
Gustavo cree que toda esta historia marcó un cambio en el mundo de las galerías:
“Nos unió, éramos un gremio muy dividido, lleno de envidias y miedos, más que envidias. Hubo un cambio de pensamiento, entendimos que juntos podemos ser más fuertes, que compartiendo ayudamos más.
Dentro de todo lo malo, ha sido una cosa buenísima para nosotros, que estamos en el lado que se sataniza al tratar de comercializar el arte. Una de las iniciativas más importantes fue la subasta en octubre en el Museo Jumex, es la subasta en la que se ha recaudado más en la historia del país y todo lo que se recaudó fue para los afectados por los terremotos. Fue muy importante lo que pasó allí”. Fuente: Agencia SUN