IMPULSO/ Edición Web
Francia
El Gobierno de Francia inauguró la primera carretera solar del mundo. Esta revelación contempló solo los primeros mil kilómetros cubiertos por tres mil placas fotovoltaicas, las cuales pueden producir la energía eléctrica necesaria para alimentar a una ciudad de por lo menos cinco mil habitantes.
Esta obra fue apoyada por una subvención del estado, la cual contó con una inversión de más de cinco millones 200 mil dólares. Sin embargo, este proyecto espera ser expandido a varias partes del país europeo, pues el ejecutivo planea expandir este proyecto a mil kilómetros de vías en toda la nación para los siguientes cinco años.
Y pese a que la región no cuenta con un clima lo demasiado apto para acumular energía a gran escala, se espera que la producción anual llegue a contar con los picos más altos en verano, con una capacidad de hasta mil 500 kWh.
Además, este proyecto surgió como una alternativa para guardar la energía suficiente sin realizar modificaciones en paisajes naturales o invadir lugares agrícolas. Fuente: Aztecanoticias