IMPULSO/ Agencia SUN
Chihuahua
El Palenque Santa María nunca estuvo oculto, desde la autopista a ciudad Cuauhtémoc se podía ver el enorme letrero en su fachada y los anuncios de cerveza de casi cinco metros. Pero la autoridad no lo sabía.
La noche del sábado se programaron 20 peleas, la última de la noche sería La Escondida contra Cerro Prieto, en la que se jugarían la vida un gallo de 2 kilos 220 gramos frente a otro de 2 kilos 330. En el centro gallístico acudían niños, adolescentes; se apostaba y se vendía cerveza. Y la autoridad tampoco lo sabía.
Los tres órdenes de gobierno reconocieron que el sitio no contaba con ninguno de los permisos que se requieren para operar. Fue hasta que un par de pistoleros irrumpieron alrededor de la medianoche y acribillaron a una veintena de personas, privando de la vida a seis de ellas, que “se dieron cuenta” del “palenque clandestino” como lo definió un comunicado de la Fiscalía estatal.
A 48 horas, no existe una versión oficial de las causas del incidente, pero desde la propia fiscalía se ha filtrado que en el lugar fueron asesinados dos importantes jefes del narcotráfico del Cártel de Sinaloa.
Dichos líderes no aparecían en ninguna lista de los más buscados, ni se les mencionó antes en algún comunicado, pero ahora se deja saber veladamente que ocupaban cargos jerárquicos en la organización. Se trata de Héctor Murillo Tavares y Josué Otero; sin embargo, la autenticidad de la versión no fue confirmada oficialmente por la FGE.
Tras el ataque estarían pistoleros de La Línea, el brazo armado del Cártel de Juárez, y el móvil sería la disputa por la plaza en busca del control de la venta de drogas.
Entre las otras víctimas del ataque al palenque están Daniel, un estudiante de 15 años, a quien sus compañeros de escuela recuerdan como un joven carismático, aficionado a la música electrónica.
También estaba Perla Jasso, de 32 años, madre de familia de dos niños, que estaba en planes de montar un salón de belleza, según narraron familiares en su funeral; así como Leonardo Rodríguez Prado, de 35, quien fuera hasta hace un par de años fotógrafo de Pensiones Civiles.