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“ERUVIEL AVILA VILLEGAS”

Ha causado comentarios de todo tipo la designación de Ávila Villegas como Presidente del Comité Directivo del PRI en la Ciudad del México. Una afamada periodista cuestiono ¿Por qué? Si entregó al Estado de México señalando los malos resultados en la pasada elección y la filtración de información delicada a Andrés Manuel López Obrador. Son veinte los municipios en donde Alfredo del Mazo Maza perdió las elecciones a manos de Morena, tres a manos del PRD y solo uno conquisto el PAN. Además comienzan a sonar dependencias en donde la entrega recepción es delicada, una de ellas es SEIEM que cuenta con la friolera de ochenta mil maestros federalizados.
Pero las acusaciones a Ávila Villegas no deben ser en los medios de comunicación, tienen que ser en las instancias legales. Recordé el año 2005 cuando se conformó la comisión de la verdad después que Roberto Madrazo le pisara la cola a Arturo Montiel. Mediáticamente lo desactivo y en las instalaciones del Comité Ejecutivo Nacional del Revolucionario Institucional Montiel Rojas se bajó del barco y todo el esfuerzo del TUCOM se vino abajo.
Es cierto, a nadie complació los resultados de la comisión de la verdad que exoneraron a Montiel Rojas, la administración local encabezada por Peña Nieto lo exoneró de todos los cargos, pero tampoco a nadie convenció la investigación del magnicidio de Luis Donaldo.
Si queremos o aspiramos a resultados diferentes, tenemos que contar con instituciones diferentes. El primer órgano constitucional autónomo que debió existir es la Fiscalía General de la República, antes de esto: INEGI, CNDH, IFAI, el Banco de México y el IFE existieron.
Nada tiene que hacer en la Ciudad de México Ávila Villegas. La estrategia es la misma desde 1997. Restar votos al PRD y ahora a MORENA lo cual es inservible. Para 1994 al termino del Salinato el PRD estaba ya consolidado, faltaba la democratización de la Ciudad de México. Una caja chica, un Departamento Administrativo “DDF” con estructura como entidad federativa, con una secretaría general de gobierno, finanzas, salud, educación, obras y todas las que se requieren estaban por conquistar el voto. Las delegaciones políticas estaban por desaparecer como tal. Chuyaffet fue Delegado en Benito Juárez en la administración del Profesor Hank, ni siquiera conocía Plaza Universidad.
Así de un día a otro, toda la estructura del Revolucionario Institucional no fue desmantelada, sino que, sencillamente cambio de color. El operador y premiado fue Roberto Campa Cifrián pues esta era la instrucción. Ya estaba todo arreglado y ¿Por qué no? Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano arrasaba en popularidad y arraso en las elecciones de 1988. Salinas fue presidente de milagro. Los resultados electorales lo hicieron entrar en razón. Al final, tuvo que pactar la Real Constitución de la Nación Mexicana y circunscribirse a las facultades meta-constitucionales y su ordenamiento. Así en ese momento dejaron, en 1988, las estructuras de apoyar a Cárdenas. Nueve años después Cárdenas consolidaría su frente que si era frente opositor y democrático al invitar a la competencia electoral.
Así las cosas desde 1997 nada puede hacer el PRI en la Ciudad de México porque los priistas de ese demarcación entendieron que su candidato a la grande en el 88 no era nadie más que Cárdenas, así no les importo pintarse de amarillo de un día a otro.
Pero todos hemos olvidado el principio político-jurídico romano: “capitis deminutio”. La expresión latina “capitis deminutio”, se traduce literalmente: disminución de la capacidad. Para el Derecho Romano la “capitis deminutio” suponía una incapacidad de derecho absoluta en la persona o bien en el Estado. Si pierdes la cabeza, si pierdes el control, el órgano dejara de hacer su función. Hace mucho tiempo la cabeza, la capital está perdida, fuera de control en manos de la oposición y en contra-sensu, si gobiernas la cabeza, el cuerpo es tuyo. Cierto o no, el caso es que no hay estrategia mediática, política a este momento que pueda hacer ilusionarse a Ávila Villegas para obtener un sorpresivo resultado.
¿Entonces que hace en el extinto PRI de la Ciudad de México? Para el mismo PRI nada. Para sí mismo, mucho.
Bajo el principio romano, es en esta demarcación donde están asentados los poderes de la unión. Su proyecto personal es la candidatura del PRI a la grande. En este orden de ideas, aun cuando su administración en el gobierno del Estado de México comience a restarle popularidad y a mancharlo, mientras cabildea desde esta posición con toda la clase política, oportunidad valiosa para invitarlos a sumarse a su proyecto.

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M. en D. Constitucional y Amparo

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