IMPULSO/ Edición Web
Riga
Familiares del estudiante mexicano Daniel Reynoso Lesperance, detenido en Letonia el pasado 20 de diciembre, denunciaron hoy que todavía no han podido visitarlo ni hablar con él, y explicaron que, según su abogada, se le acusa de delitos que no son motivo de prisión.
Daniel, matriculado en la carrera de Ingeniería Mecánica Eléctrica en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) Campus Estado de México, llegó a Letonia en agosto dentro de un programa de intercambio estudiantil.
Según la versión de la familia, cayó “en la trampa” de un casero que le ofreció una habitación que estaba en “condiciones muy insalubres”. Al querer salir, el casero le dijo que se quedaría con el mes de depósito y le exigió que le pagara más meses. Días después de la salida del apartamento, Daniel se encontró con el ex casero por la calle, que siguió amenazándolo y tuvieron un pequeño enfrentamiento.
Aproximadamente una semana más tarde, aparecieron en su nueva casa fuerzas policiales de Riga, que lo detuvieron. “No presentaron ninguna orden de arresto ni se identificaron, se lo llevaron y le enseñaron un escrito, que pensamos que pueden ser sus derechos”, y se lo hicieron firmar, apuntó. Además, agregó que las autoridades letonas no les han proporcionado “ningún tipo de información” que demuestre la culpabilidad de Daniel Reynoso. “Siguen diciéndonos que no necesitan demostrarnos nada“, aseguró.
Padre y hermano se hallan en Riga, capital de Letonia, desde finales de diciembre, a fin de dar seguimiento a este caso que, aseguran, está lleno de irregularidades. “No tienen ninguna evidencia de que él haya hecho nada, llegaron a su apartamento sin avisar a ninguna autoridad mexicana (…) y a ningún familiar tampoco. Llegaron como a raptarlo, casi”, explicó el hermano.
Luis Alberto Reynoso, hermano del detenido, explicó que, según una “traducción general” que ha obtenido la familia de la acusación original en letón, su hermano está detenido por “agresión física en grupo y el robo de una tarjeta de crédito, que no se utilizó”.
Con base en esto, y de ser declarado culpable, se deberían reponer los daños. El joven detenido, de 23 años, ha podido verse con la abogada, que pudo conocer las condiciones en las que se encuentra. “Nos dice que sí le dan de comer. Nos ha pedido ropa, por lo que debe usar la misma desde que entró. Y no le han proporcionado sus medicinas, que debe tomar a diario porque es hipertenso”, relató.
La abogada que han contratado en el país les dijo que, en el peor de los casos, el joven detenido “ni siquiera tendría que pasar tiempo en la cárcel”, y que los días que lleva en prisión en la etapa de investigación son “injustificables”.
Tal y como comunicó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México la pasada semana, el caso está siendo atendido por el cónsul honorario de México en Letonia, Carlos Arredondo, y representantes de la Embajada de México en Suecia, así como la Dirección General de Protección a Mexicanos en el Exterior.
Las autoridades mexicanas “hacen presión para que se expliquen todas estas irregularidades, y que demuestren alguna evidencia de que mi hermano es culpable. Y en varias cosas diplomáticas y legales también nos apoyan”, agradeció el hermano.
Con información de Radio Fórmula e Informador.mx
