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Entre columnas

IMPULSO/ Eliseo Lugo Plata
Ricardo Anaya da risa


ORIENTE: Causa hilaridad ver y escuchar los promocionales de Ricardo Anaya, líder nacional del Partido Acción Nacional, cuando se dirige al electorado y da las gracias por los triunfos alcanzados por ese partido en los comicios pasados para elegir Gobernador.
“Sí se puede”, señala, y menciona que el PAN está de vuelta, da gracias a los que han creído en ese partido y que le han dado el triunfo en siete estados de la República, aunque en algunos de ellos fuera en coalición.

Estar feliz es su papel, pues, con un triunfo de ese tamaño, este partido o el PRD tienen razón para bailar de gusto; sin embargo, Ricardo Anaya, en el fondo, debe saber que no ganó el PAN, sino que el PRI es quien ha perdido.
El voto de castigo que le han propinado al Partido Revolucionario Institucional se fue de su lado, un resultado muy engañoso que podría afectar a los blanquiazules para los comicios del 2018.
Los estados donde más castigaron al PRI fueron Veracruz, Tamaulipas y Chihuahua, no así en las otras cuatro entidades, donde se dice que el mismo PRI maniobró para que sus candidatos perdieran y se perjudicará de esa forma a Manlio Fabio Beltrones.

OCCIDENTE: Tanto panistas como perredistas ya están pensando en una coalición en el Estado de México para los comicios del año que entra; sin embargo, las cosas no les están saliendo como esperan, pues, si en un principio pensaban en Josefina Vázquez Mota para candidata, ahora no tienen gallo de buen tamaño.
La negativa de Josefina Vázquez Mota para la candidatura no sólo les afectó en lo intrínseco, sino que les partió toda la chapa al señalar ésta que el panismo del Estado de México era el más corrupto del país.
Tanto la caballada del PAN como del PRD está muy flaca y su militancia es muy pequeña. Tal vez logren importantes cifras con los simpatizantes, sobre todo con un posible voto de castigo, pero difícil sería conseguir un triunfo para los opositores del PRI.

SEPTENTRIÓN: Los votos que anteriormente podría sumar el PRD ahora estarán repartidos entre este partido y Morena, que, a decir de las cifras en los últimos comicios, ha crecido significativamente. Por lo que se refiere al Partido del Trabajo, éste, tal vez en el Estado de México, pierda el registro por falta de votos, pues si su candidato va a ser Óscar González, este mismo podría ser su enterrador.
Los otros partidos no tienen ni remotamente posibilidades de triunfo en la Gubernatura, pero arrastrarán votos, situación que podría favorecer al PRI.
MEDIODÍA: Ante este panorama, si los gobierno del PRI, es decir, el Gobierno estatal y municipales se ponen las pilas y en estos últimos meses hacen su mejor papel, podría repetir un priista en la Gubernatura, de lo contrario, el voto de castigo podría darle el triunfo a cualquier caballo flaco con las concebidas graves consecuencias que eso significa.
Y una de esas actitudes es la que debe cambiar el actual presidente del PRI mexiquense, Carlos Iriarte Mercado, pues con ese pálido discurso que tiene no convence ni a los propios empleados del Tricolor.
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