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IMPULSO/Eliseo Lugo Plata
Bravucón de cantina

ORIENTE: Perfectamente bien aplicado fue el calificativo que dio Juan Zepeda, candidato del PRD al Gobierno estatal, a Andrés Manuel López Obrador, esto al referirse a su amenaza de que si los partidos “de izquierda” no hacen alianza con MORENA en el Estado de México, no los va aceptar para el 2018.

Juan Zepeda ha señalado que estas expresiones son de un “bravucón de cantina”, y es precisamente lo que ha sido el dirigente de MORENA toda su vida, desde que era del PRI, luego del PRD y ahora del partido de su creación.

Pero no sólo ha sido un bravucón de cantina, ha sido una persona de lo más falso que ha existido en la política mexicana, ya que nunca ha cumplido su palabra. Cuando se comprometía a respetar resultados de sus adversarios, jamás los reconoció.

Pero lo más grave de todo es su doble discurso es que ahora señala que la maestra delfina Gómez les va a dar unas clasecitas de honestidad, cuando ella, igual que él, lo meno que tiene es la honestidad. La candidata de MORENA al Gobierno mexiquense enfrenta múltiples acusaciones de corrupción cuando fue Alcaldesa de Texcoco.

OCCIDENTE: Por su parte, Andrés Manuel López Obrador ha sido exhibido a través de sus militantes como un corrupto irremediable. Hace años, René Bejarano, hombre de su confianza, fue filmado cuando recibía una millonaria cantidad de dinero de un empresario para su campaña.

Más recientemente, Eva Cadena ha sido exhibida en dos videos recibiendo dinero para Andrés Manuel López Obrador. Ella es Diputada por MORENA en el Estado de Veracruz y en el primer video recibía medio millón de pesos, en el segundo video, recibe diez mil dólares y cincuenta mil pesos, igualmente para Andrés Manuel López Obrador.

Ésas son las clasecitas de honestidad que López Obrador quiere dar en el Estado de México. Quizás de lo que pudiera dar clases Delfina Gómez es de cómo trabajar la doble moral. Para eso sí han sido buenos ella y López Obrador.

SEPTENTRIÓN: la contaminación se ha agudizado terriblemente en los valles de México y Toluca debido en parte al calor que se ha estado sintiendo en la última semana, sin embargo, con calor o sin calor, la contaminación es un hecho y los que pudieran tener parte de la responsabilidad son los empresarios industriales.

Desde luego, ellos, a través de la Unión de Industriales del Estado de México, rechazan ser los culpables. Desde luego que la industria es una de las culpables, pero hay otros culpables: el transporte público.

MEDIODÍA: Un análisis de los expertos señala que, si bien la industria y el transporte público coadyuvan a la contaminación, es “en menos medida que otros culpables”, y estos son los automovilistas.

Señalan que la circulación de los millones de vehículos, aún con su verificación, son los que más contaminan, esto aunado a las prácticas de los propios ciudadanos de quemar todo tipo de objetos.

En síntesis, nadie puede rehuir a su responsabilidad, y si de echar culpas se trata, todos somos culpables de que haya tanta contaminación. [email protected]

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