IMPULSO/Eliseo Lugo Plata
Campeones del debate
ORIENTE: Y se llevó a cabo el primero de dos debates, no hubo sorpresas, se esperaba lo que se vio: pocas propuestas y demasiados ataques, pero es interesante hacer un análisis del mismo.
¿Realmente se trató de un debate?, estrictamente no fue un debate, un debate es una discusión en la que dos o más personas opinan acerca de uno o varios temas y en la que cada uno expone sus ideas y defiende sus opiniones e intereses.
En la definición no se dice que haya ataques y ofensas, y este “debate”, como los que hemos visto en México, se ha caracterizado por ello. Pero, en fin, habremos de hacer los comentarios pertinentes.
Josefina Vázquez Mota se llevó el campeonato de los ataques, incluso, en lo que podríamos señalar que fue el primer round, dejó noqueada a Delfina Gómez.
En los siguientes dos rounds, Josefina volvió a pegar con el mismo gancho al hígado a la texcocana, que no tuvo tiempo ni de acomodar su guardia, sin embargo, estuvo dando algunos golpes que en ningún momento fueron contundentes, ataques dirigidos más contra Alfredo del Mazo que para Josefina.
OCCIDENTE: Josefina Vázquez Mota también se dio tiempo para pegarle algunos jabs al candidato del PRI, Alfredo del Mazo, pero éste si pudo defenderse, recuperarse y tirar varios ganchos a la poblana, a la que cerró la boca con el asunto de los 900 millones de pesos que recibió para los indocumentados.
Pasando al campo de las propuestas, Alfredo del Mazo se coronó campeón, las críticas de sus oponentes no lograron doblegarlo y los pudo vencer con mejores argumentos, tanto en el campo de la seguridad como en el de desarrollo social y la corrupción.
Reconoció muchos de los errores de su partido, pero se comprometió a hacer cambios e incluso a eliminar el fuero para los corruptos; asimismo, dio los datos duros que les faltaron a sus oponentes.
SEPTENTRIÓN: Óscar González Yáñez fue el más dañado, no porque le hayan pegado, más bien, fue ignorado hasta con su ridícula carta compromiso que presentó; sangró de la boca en todos los rounds por tanta mordida que se dio, pues, si había alguien corrupto en la mesa, ése era él.
Por lo que respecta a Delfina Gómez, además de su pobreza intelectual, no le ayudó su problema de pronunciación. No deja de ser una ama de casa que se ha colado hasta esas alturas, culpa de su padrino Higinio Martínez Miranda. Ni hizo propuestas, ni se supo defender de todo lo que la culparon a ella y a su partido.
MEDIODÍA: Juan Zepeda estuvo en su papel, es decir, no atacar y sólo encasillarse en el tema de la seguridad, único mérito que tuvo al parecer en Nezahualcóyotl, aunque dijo que había dado a ese municipio un buen desarrollo.
Por lo que respecta a teresa Castell, la candidata independiente, se esperaba más de ella. Estando y viviendo en un país con sistema de partidos, repitió y repitió que los políticos no sirven, pero hizo bien en no involucrarse con promesas como las de Josefina Vázquez Mota, quien no dijo cómo le haría para dar transporte gratis a los alumnos y cómo poner un médico en cada colonia. “El prometer no empobrece, dar es lo que aniquila”, dice el dicho.
