IMPULSO/ Eliseo Lugo Plata
Un tercero en discordia
ORIENTE: Quizás los acontecimientos sociales de estos primeros días de enero, incluso el registro de Isidro Pastor Medrano como candidato independiente, modifiquen la decisión que el PRI habrá de tomar en cuanto a su candidato para la Gubernatura mexiquense.
Aún y cuando el presidente Enrique Peña Nieto, principal elector del PRI, ha explicado los motivos del alza de la gasolina y considera que fue lo correcto, no lo piensa así la masa social y mucho menos los partidos de oposición, que seguramente aprovecharán esta medida para atacar al candidato Tricolor.
En este sentido, muchos, por no decir todos los aspirantes visibles, son vulnerables ante la crítica, algunos por su cercanía con el Presidente y otros por ser legisladores, pues es a ellos a quienes culpan de votar las reformas hacendaria y energética, aunque, repito, eso no tiene nada que ver con el alza a la gasolina.
OCCIDENTE: Si a este le agregamos que los diversos grupos políticos mexiquenses están apoyando a determinados aspirantes y no se ponen de acuerdo, el gran elector podría pensar en una tercera opción, es decir, en un caballo negro, pero que esté “pastando” fuera de su Gabinete.
Cuando Ricardo Aguilar castillo vio que las cosas se complicaban para los aspirantes visibles, vislumbró la posibilidad de ser el “caballo negro”, sin embargo, repito, ser miembro del Gabinete también podría afectarlo.
En los últimos días, se escucharon voces en los corrillos políticos del Estado de México en el sentido de que los únicos dos aspirantes con posibilidades serían Ana Lilia Herrera Anzaldo y Carlos Iriarte Mercado; no obstante, esto que se dice en los corrillos políticos podría ser muy distinto a los que piensa y planea el “gran elector”.
SEPTENTRIÓN: En este sentido, los analistas políticos han señalado que un tercero podría ser la solución del PRI en la selección de su candidato y mencionan al actual presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, Juvenal Cruz Roa, como el posible abanderado del PRI.
La esperanza señala que de allí salió Enrique Peña cuando fue designado candidato del PRI para la Gubernatura.
Carlos Iriarte también lleva un antecedente, pues de la dirigencia tricolor salió a la candidatura. Como una aportación histórica, Juan Fernández Albarrán era secretario general del CEN del PRI cuando fue nombrado candidato; es la posición que actualmente tiene Carolina Monroy del Mazo, también con excelentes posibilidades.
MEDIODÍA: Y si de diputados se trata, caso de Alfredo del Mazo Maza y el propio Carlos Iriarte Mercado, Salvador Sánchez Colín era diputado federal por Texcoco cuando fue designado candidato del PRI al Gobierno del Estado de México y muchos, muchos gobernadores, también fueron senadores, algunos primero y otros después de ser mandatarios.
Alfredo Zárate Albarrán, por ejemplo, brincó del Senado a la Gubernatura y Adolfo López Mateos, fue senador antes de ser presidente. Ana Lilia Herrera ya ha pasado por el Senado. Varios secretarios de Gobierno han sido gobernadores, posición de José Manzur Quiroga.
Quien vaya a ser el abanderado priista no la tendrá tan fácil, no por los opositores, sino por el ambiente social.
