IMPULSO/ Eliseo Lugo Plata
La nueva Fiscalía
ORIENTE: Si hiciéramos una encuesta entre personas que transitan por la calle le preguntásemos la confianza que tienen a las instituciones, seguro estoy que no hay confianza.
Si preguntásemos sobre la confianza que le tiene a la policía, tal vez hasta contestarían que le tienen más confianza a un delincuente, y esto con respeto a los policías que son honestos, de allí que las calles ahora estén adornadas con miembros del Ejército mexicano y de la Marina, cuidando las calles y combatiendo a los delincuentes.
Y entre estas dos instituciones, el Ejército ya está tan desprestigiado que ha perdido respeto, sin embargo, allí está porque se tiene que confiar en algo.
Son los miembros de la Marina quienes más confianza dan a los ciudadanos con respecto al combate a la delincuencia organizada, y tal vez pasen décadas y muchas acciones positivas para que la gente vuelva a confiar en su Ejército.
OCCIDENTE: Con respecto a la Policía Estatal, su desprestigio no es únicamente por los atracos que cometen o por el contubernio que tienen con los delincuentes, sino porque son ineficientes y prepotentes. Hoy día, la gente dice que los policías, estatales o municipales, se parecen al espíritu santo, porque nadie los puede ver y sin embargo andan haciendo de las suyas.
Y si hablásemos de la procuraduría General de Justicia, es donde menos confianza tiene la gente, puesto que al momento de iniciar una carpeta en el Ministerio Público, ya se hace presente la corrupción. Los representantes sociales se venden al mejor postor, y no se diga cuando se llega a los juzgados. Los jueces son, por excelencia, mercaderes de la justicia.
SEPTENTRIÓN: La aprobación de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México ha sido una buena noticia de fin de año que dieron los diputados locales. Se supone que está mejor diseñada para dar mejores resultados a los mexiquenses, lo que contribuirá a que la institución procuradora de justicia recupere la credibilidad que tanta falta le hace, y que en muchas ocasiones es obstáculo para que los ciudadanos se atrevan a denunciar.
Los observatorios de justicia señalan que 90 por ciento de los delitos no se denuncian por motivos de corrupción. Pero también es bueno que su aprobación se haya dado por unanimidad, porque así nos da muestra de que siempre es posible ponerse de acuerdo por los intereses fundamentales de los mexiquenses, como bien lo sabe Cruz Roa, quien se ha convertido en promotor de la civilidad política.
MEDIODIA: Los ciudadanos esperamos que la Nueva Fiscalía del Estado de México no sea una gata revolcada y salga peor que la Procuraduría. Hay confianza en que así como la han diseñado los diputados, de todos los colores, opere en su funcionamiento a favor de los ciudadanos.
El Fiscal general, por norma, debería comparecer cada seis meses ante los legisladores para rendir cuentas de sus resultados, y si no hay buenos resultados, procurar el cambio necesario.