IMPULSO/ Carlos Ravelo Galindo
Estímulos
Los consejos, estímulos o mantras son expresiones significativas que tienen un poder psicológico y espiritual en nosotros. No importa si son leídas, habladas o escuchadas, siempre tienen el poder de traer calma y serenidad a nuestra vida, mientras nos ayudan a sanar nuestro dolor emocional.
Personalmente, y con auxilio de Octavio García y su esposa Anita, hemos descubierto que funcionan especialmente bien en las mañanas, pues al ser la primera cosa con la que iniciamos nuestro día, aseguramos comenzarlo con una actitud receptiva, alegre y llena de esperanza.
Aquí te dejamos algunas recomendaciones que puedes incluir en tu ritual matutino: Nunca asumas que estas atrapado en la vida que tienes hoy. No lo estas. La vida cambia cada momento, y tú también.
Es común pensar que la situación en la que estamos actualmente es imposible de cambiar. Recuerda esto: ”No importa que tan buena o mala sea tu situación, todo cambiará”.
Hay una gran diferencia entre la fatiga vacía y el cansancio gratificante.
Invierte tiempo en las cosas que te interesan y te importan.
Cuando haces cosas con tu corazón todo se siente bien, Incluso si esto significa enfrentar muchos obstáculos.
Si tienes el poder de hacer feliz a alguien hoy, hazlo. El mundo necesita más de eso.
No dejes que nadie tenga el poder de arruinarte el día ni cambiar tu estado de ánimo. Es fácil expandir positivismo y hacer sonreír a alguien.
Trabajar duro y con atención plena y consiente. Haz lo que tengas que hacer, e ignora el drama a tu alrededor. Deja que tu éxito hable por ti.
Uno de los secretos de la vida es estar concentrado. No dejarte distraer por la negatividad de otros. Y lo más importante no dejar que te influya a nivel personal.
El hecho de que estés en la lucha no significa que vayas a caer. Cada éxito requiere algún tipo de lucha digna. ¿Recuerdas cuando trabajaste duro por conseguir aquello que realmente querías lograr? Cree que aún puedes hacerlo porque eres la misma persona que puede volver a lograrlo.
El problema no es problema, el problema es pensar demasiado en él, déjalo ir y sé libre. Analizar nuestra situación es bueno, pero asegúrate de no pensar demasiado en ello porque corres el riesgo de quedarte allí. En ocasiones, nuestra mente crea más problemas que los que realmente hay.
Con cada respiración deja de lado las expectativas, el miedo, el pesar y la frustración. Deja de lado la constante necesidad de aprobación. Nada de eso es necesario.
Continúa: No dejes que tu pasado condicione tu futuro. Lo más importante es lo que haces ahora, en tu presente. No puedes esperar la victoria, mientras planificas la derrota. No te pierdas a ti mismo en la venganza, la competencia o los celos. Pronto descubrirás que no son importantes. Algunas veces tu mente necesita más tiempo para aceptar lo que tu corazón ya sabe. [email protected]