En la mira

Candidatura de Ricardo Anaya pende de un hilo
David Arellano
Cada vez más salen y salen tranzas de Ricardo “El Cerillo” Anaya, cada semana se le suman escándalos de lavado de dinero y deja ver que es más mentiroso que Pinocho. Recuerdo que hace algunos meses se hablaba sobre los viajes del ahora candidato del PAN-PRD-MC a la Presidencia de la Republica, de los que decía dos cosas: que no viajaba tan constantemente y que cuando lo hacía no era en primera clase e incluso refirió que vivía como cualquier persona de clase media. En su declaración 3 de 3, afirmaba ganar cerca de un millón 200 mil pesos por año, algo así como 100,000 mil pesos al mes, datos que no checan cuando sus hijos viven en Atlanta, Estados Unidos, además de que estudian en escuelas privadas. Tan sólo del seis de noviembre de 2014 al 24 de octubre de 2016, Ricardo Anaya realizó 121 viajes en primera clase por la aerolínea Delta, es decir, un viaje cada seis días, 121 viajes redondos en 24 meses.
Pero no todo queda allí, el tema que todos conocemos, el de la venta de la bodega, es uno de los tantos ejemplos del lavado de dinero que le han destapado a Ricardito “El Cerillo” Anaya. En esta tranza, se habla sólo de 54 millones que le cayeron en la bolsa; según documentos, la compra y la inversión no checa ni con lo que declara que gana y mucho menos con las propiedades que según posee, habla de un préstamo bancario para la compra e inversión en la nave industrial, misma que en datos de su declaración patrimonial, y según las reglamentaciones de préstamo, sus propiedades debería de sumar tres veces el valor del préstamo, cosa que los propios datos y declaraciones del aún candidato de la coalición de México al Frente no es así; simplemente, los datos no cuadran.
Pero eso no es todo, existe otra tranza que rebasa los 367 millones de pesos, casi siete veces más que el de la bodega, el otro mecanismo de su enriquecimiento es a través de dinero público del Ramo 23, donde, según la propia legislación, a cada diputado federal le corresponden, y así lo aprobaron, 20 millones de pesos para aterrizarlo en obras en los municipios que están dentro de sus distritos; por lo menos lo recalcó en su momento Ernesto Cordero, quien fuera coordinador de la bancada del PAN en la Cámara Federal y ahora en el Senado.
Les explicó la maniobra: cuando Ricardo “El Cerillo” Anaya era coordinador de la bancada federal del PAN, contaba con 108 diputados y a cada uno de ellos le correspondían por parte del Ramo 23 20 millones de pesos, hasta allí todo esta como marca la ley, sin embargo, el negocio estaba en que cada diputado tenía que darle el 17 por ciento a través de la empresa o empresas que contrataban para las obras, porcentaje que le entregarían como condicionante para que realizarán la obra, es decir, un poco más de tres millones 400 mil pesos, esto multiplicado por los 108 diputados del PAN que eran en ese momento, haga usted la cuenta, pues resulta un poco más de 367 millones 400 mil pesos, tan sólo en ese ejercicio. El tema de los 54 millones de la nave industrial son cacahuates para el Pinocho de la Coalición de México al Frente.
Están nerviosos en el PAN-PRD-MC porque la libertad y la candidatura de su gallo pende de un hilo, se escuchan nombres como el de Miguel Ángel Mancera e incluso Santiago Creel para suplirlo, pero todos los detalles en la siguiente entrega. Y recuerde que, si se van a portar mal, por favor… cuídense bien… Nos saludamos en Facebook/David Arellano y en Twitter@DavidArellanomx, hasta el próximo jueves.